Los usuarios de la residencia de mayores del Cristo, uno de los Establecimientos Residenciales para Ancianos del Principado (ERA) que hay en Oviedo, llevan casi dos meses sufriendo las consecuencias de los cortes de luz que se producen en el edificio a consecuencia de los trabajos que se están llevando a cabo para renovar la instalación de un edificio en el que viven unas 190 personas. Según denuncian algunos de los internos, a principios de esta semana tuvieron que irse a la cama "sin cenar" a consecuencia de uno de estos cortes. "Sólo nos ofrecieron unos yogures porque en las cocinas no había manera de hacer nada caliente", explica una de las afectadas.
Las personas que se pusieron en contacto con este diario para denunciar la situación prefieren mantenerse en el anonimato "por temor a posibles represalias", pero aseguran que los problemas son constantes. "A veces se retrasan las horas de las comidas y nos quedamos sin calefacción con los días tan fríos que están viniendo. Cuando hay problemas los ascensores tampoco funcionan y las personas que tienen problemas de movilidad tienen que quedarse en sus habitaciones porque no pueden acceder a la planta baja, que es donde están la mayoría de los servicios comunes", señala otra de las afectadas.
Por otro lado, la ausencia de electricidad también afecta directamente a la higiene, según los denunciantes. "Si no hay agua caliente las cuidadoras no pueden limpiar a las personas que no pueden valerse por si mismas. La gente tampoco puede ducharse y las limpiadoras no tienen los medios para trabajar en la residencia. También lo están sufriendo en la lavandería", explican las mismas fuentes.
Respuesta del ERA
La gerente de la red de Establecimientos Residenciales para Ancianos de Asturias (ERA), Ana María Suárez Guerra, reconoce que hubo cortes puntuales en el suministro porque se están llevando a cabo tareas de mantenimiento y dice que la calefacción sólo se cortó sólo para purgar los radiadores.
