El exjefe de la Policía Local de Oviedo, el comisario José Manuel López, se acaba de quitar de encima (salvo recursos) una de las cuatro causas separadas que se abrieron en juzgados asturianos al hilo de su condición de investigado dentro de la presunta trama Enredadera de amaños de contratos públicos.

López, que ayer precisamente volvió a declarar ante el juez por una de estas piezas separadas, acaba de recibir la notificación de un auto de hace semanas del juzgado de instrucción número uno por el que se archivaba una causa por un supuesto delito de prevaricación administrativa. En este caso, un hallazgo casual dentro de las escuchas de la investigación de Enredadera, se suponía que se había interceptado una conversación en la que una persona pedía conocer si un radar le había puesto una multa. El juzgado considera ahora que, una vez practicadas diversas actuaciones, no ve indicios del delito por el que se inició la causa.

Al margen de su condición de investigado en Badalona, en una trama cuya vertiente leonesa, por la que está imputado López, ya ha sido también archivada, al comisario le queda un proceso referido a las tarjetas especiales para aparcar, otro sobre la revelación de secretos relativos a la compraventa de un vehículo y la relacionada con una multa retirada al coordinador de IU en Asturias, Ramón Argüelles. Es por esta última por la que López acudió ayer a declarar al número 2. A la salida, el exjefe de Policía se mostró confiado en superar todas las causas y volver a su puesto.