En los quince años que llevan bailando juntos el uruguayo Adrián Rodríguez y la brasileña Anita Santos han visto crecer la afición por las danzas latinas a lo largo y ancho del mundo. Ayer bailaban en Oviedo, en Las Caldas, donde se celebra el Congreso Norte Latino, una macro convención del baile que pone a la ciudad en el mapa de ritmos como la salsa, la bachata o el kizomba. "Hay un auge del baile latino pero es algo que se viene gestando desde hace muchos años. Vas ahora aun evento en Hong Kong, y está lleno de gente muy joven que baila, y en España hay dos o tres eventos todos los fines de semana del año", cuentan antes de ofrecer la primera clase de lo que será un largo e intenso fin de semana. Ellos son dos estrellas de esto, seis veces campeones del mundo de salsa. Su vinculación con España llega por la televisión, gracias al programa, "Mira quién baila", en el que enseñaron a bailar a un buen número de famosos. Para la brasileña, "el baile es muy sano, una filosofía de vida muy saludable y muy alegre".
El baile latino triunfa, y en los últimos tiempos está teniendo especial tirón entre los jóvenes. Así se pudo ver ayer en Las Caldas, con un alto porcentaje de jóvenes, de las comunidades del norte de España. La razón del éxito, según uno de los profesores, el campeón de Europa y subcampeón del mundo de bachata Esteban Mula, es que se trata de una actividad "muy social, que está enfocada a todo el mundo, a todas las edades".
Miriam Toca, su pareja de baile en los campeonatos y también profesora, señalaba que la incorporación de adeptos a estos bailes "está siendo como una plaga, y está muy bien, porque es un hobby bonito, sano, que sirve para unir a la gente, para desinhibirse; lo recomiendo, porque para mí, es medicina".
El baile es una forma de contactar entre la gente, de comunicarse, de conectar", sostiene Adrián Rodríguez. "Esa música ha entrado muy fuerte en la radio, y llama a la gente más joven, que cuando lo prueba queda enganchada".
La directora del congreso, Laura Alonso, se mostró muy satisfecha con una iniciativa que comenzó hace 11 años "casi como una cena de amigos" y hoy reúne a tanta gente con profesores del prestigio de los mencionados o de Bersy Cortez, una eminencia mundial en Salsa.
El codirector Jonathan Eguía explicó que a lo largo del fin de semana se impartirán hasta 39 talleres de salsa, bachata o kizomba, actividades que implican "un cambio por completo en tu estado anímico; la gente, después de bailar una hora ya mejora su ánimo" y que tienen "beneficios cardiovasculares, además de ayudarte a conocer tu propio cuerpo y a conocer a la persona con la que estás bailando".
