Las obras de construcción del Instituto de La Florida llevan paradas desde días antes del inicio de las fiestas navideñas. Fuentes cercanas a la adjudicataria, la UTE integrada por las empresas Iguar y Ceteco aseguran que los trabajos fueron suspendidos ante la falta de respuesta de la consejería de Educación a una petición de modificar el contrato para incorporar 100.000 euros no contemplados inicialmente para la retirada de la tierra contaminada de la parcela que actualmente permanece acumulada en la zona. Desde el Principado admiten retrasos en la ejecución, cuya finalización estaba inicialmente prevista para mediados del año que viene y se compromete a "llevar adelante la obra en el más breve tiempo posible".
La incorporación de 100.000 euros adicionales a los 6,22 millones de euros contemplados inicialmente en el contrato es sólo una de las peticiones realizadas por la adjudicataria a Educación respecto a los trabajos y sobre las que no han obtenido contestación. La paralización de las obras, indican, se debe a que sin retirar la tierra contaminada es imposible continuar con las labores para construir los cimientos del edificio., proyectado en una parcela junto a la iglesia del barrio ovetense.
Sin director de obra
Los representantes de la adjudicataria se reunieron a mediados de diciembre con la directora general de Planificación e Infraestructuras Educativas, Ana Isabel López Isla, para transmitirle lo que consideran deficiencias en el contrato, pero desde entonces no han recibido respuesta. Según indican las mismas fuentes, el proyecto se encuentra sin director de obra al encontrarse de baja desde hace dos meses el funcionario al que el Principado asignó el puesto, lo que frena la toma de una decisión por parte de la administración.
En principio, el responsable de los trabajos se iba a incorporar a primeros de enero a su puesto, pero la baja se alargó más de lo previsto y no será hasta febrero cuando se reincorpore. De confirmarse estos plazos, los obreros sumarán dos meses de parálisis, lo que hace prácticamente imposible cumplir el plazo de ejecución de 18 meses iniciado en septiembre el inicio de los movimientos de tierra.
Educación pretendía finalizar la construcción del inmueble para la primavera del año que viene con el fin de equipar después el edificio y tratar de abrir las puertas del centro, demandado desde 2007, de cara al curso 2021-2022. El previsible incumplimiento de este compromiso ha llevado a los vecinos a pedir una reunión urgente con la consejería de Educación, Carmen Suárez.
