Oviedo cuenta con un nuevo colectivo ciudadano de carácter apolítico fundado por el geólogo José Galán con un único objetivo; defender el Campo San Francisco y que no transcurra "ni un día más sin que las autoridades acometan la rehabilitación integral del espacio". Bajo el nombre "Los Franciscanos", una decena de ovetenses trabajará de ahora en adelante para mejorar y proteger la zona verde. La carta de presentación es un claro guiño al monasterio fransciscano que hubo en Oviedo y cuyo huerto estuvo en los terrenos del parque. Además, es una forma de rendir homenaje al desaparecido colectivo "Los Clarisos", que se posicionó en contra del derribo del convento de Santa Clara -actual Delegación Provincial de Hacienda- durante el franquismo.

"La intención es crecer en número y hacernos más fuertes, pero de momento, somos en torno a una decena de personas con ideologías diferentes, pero unidas por la defensa del Campo", explica el promotor de la iniciativa. Así, a él se han sumado otros como el catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad de Oviedo, Leopoldo Tolivar Alas; el escritor Alberto Polledo; el presidente del colectivo Amigos de Vetusta, Lancia y Pilares, José María Navia-Osorio; Sofía Fernández-Peña de la Torre, asesora del grupo municipal Vox, la escritora e historiadora, Covadonga Bertrand: o el periodista Javier Neira. Juntos presentan hoy oficialmente el nacimiento del colectivo, a las 12.00 horas, en la Biblioteca municipal de La Granja (en el paseo del Bombé) durante un acto abierto al público.

Para "Los Franciscanos", el Campo San Francisco presenta un "deplorable y deshonroso estado de abandono" que ejemplifican enumerando parte de sus estropicios y carencias: "Desde el abandono total de las obras del kiosco del Bombé a las fuentes sin agua, pasando por pavimentos, bordillos, barandillas, y ornamentos rotos, así como la falta de reposición de árboles caídos, placas con características taxonómicas de todos los árboles y arbustos, los grafitis y el deteriorado estado del Paseo de los Álamos. Todo ello hace que exclamemos un sonoro ¡hasta aquí hemos llegado!".

José Galán subraya que el pulmón de Oviedo esté catalogado desde 2016 como Jardín Histórico y presente un estado tan "lamentable" en comparación con otros espacios que ostentan el mismo título; el Patio de los Naranjos de la Mezquita de Córdoba, el Park Güell de Barcelona o el Campo del Moro en Madrid. "El Campo es patrimonio natural de Oviedo desde hace 777 años y los ovetenses no podemos consentir su ruinoso estado. Merece un respeto excepcional y no puede ser abandonado", añade el "franciscano".