El Ayuntamiento puede entregar dinero en metálico para cualquier concurso o competición, pero es necesario que ese dinero esté incluido en el apartado correspondiente del presupuesto municipal. Como los premios del concurso de la Romería del Cristo no estaban presupuestados, en el Ayuntamiento se tramitaron "con la calificación de subvenciones", según explican fuentes municipales conocedoras de ese proceso administrativo. "No hay manera de pagar ese dinero por vía municipal si no se hace una chapuza", resumen las mismas fuentes. "Las subvenciones no son premios, eso está claro. Sólo hay tres tipos de subvenciones: las nominativas, que también deben meterse en los presupuestos, las que salen a concurso y las extraordinarias, que sólo se conceden en casos de algún desastre natural o cosas similares", añaden. Lo que está claro es que un concejal no puede ir a una fiesta a repartir cheques con dinero, por poco que sea, si no está amparado por la ley. "La fórmula que se usa habitualmente es subvencionar a alguna asociación y que sean ellos los que pongan el dinero para los premios", explica otro de los consultados.
