El presidente de la Unión de Consumidores de Asturias, Dacio Alonso, rechazó ayer el acto vandálico cometido contra el radar situado en la entrada de Oviedo por la autopista, el temido radar de Santullano, que fue destrozado y quemado con gasolina la noche del pasado jueves. "Una cosa es actuar con todas las armas legales hasta demostrar que teníamos razón en las irregularidades del radar de la Bolgachina y otra cometer un acto vandálico", sostiene Dacio Alonso. "No se puede justificar ni legitimar actuaciones de naturaleza vandalica. Nosotros, como asociación representativa de los consumidores y usuarios, defenderemos siempre la seguridad vial y que se utilicen adecuadamente y de forma verad cuantos dispositivos sean necesarios para garantizarla", añade.

El ataque contra el radar de Santullano se produjo justo después de que triunfase la batalla legal de Samuel Morán y de que la administración iniciase un proceso para devolver las multas impuestas por el radar de La Bolgachina en los últimos cuatro años. "Quedó acreditado que la DGT sabia y conocía desde el año 2018 que las actuaciones y sanciones derivadas del mismo eran manifiestamente ilegales. Al final se impuso la razón y el principio de legalidad que habíamos planteado para no acudir a la Fiscalia por presunto delito de prevaricacion: eliminar el radar, anular las sanciones, iniciar de oficio las devoluciones y pedir disculpas a los usuarios sancionados de forma irregular", explica Alonso.