"No me perdonan que haya sido la niña de los ojos de Gabino de Lorenzo, que me puso una calle en La Corredoria". La edil de Somos y conocida intérprete de tonada, Anabel Santiago, denunció ayer que sufre una "persecución política y personal" por parte del "entorno del PP" desde que se supo que iba a formar parte de la lista de la marca municipal de Podemos. Según indicó la concejala, el último episodio de esta campaña es el anuncio de un expediente laboral por no haber solicitado la compatibilidad para ser contratada como artista por el Ayuntamiento durante la etapa del tripartito siendo profesora de la Escuela Municipal de Música Tradicional. Acompañada por Ana Taboada, portavoz de Somos, Santiago afirmó que el expediente se aferra a una "mera formalidad, porque todos los contratos son legales".

El PP reaccionó ayer mismo con un comunicado en el que niega que alguno de sus ediles haya ordenado abrir ese expediente y advierte de que se reserva la adopción de medidas legales, "ante la gravedad" de las actuaciones.

Para la concejala de Somos, "lo que pretende el gobierno bipartito es dar a entender que me he vendido por los contratos que tuve con el tripartito, cuando la realidad es que me fue bastante mejor con Gabino de Lorenzo y Agustín Iglesias Caunedo, los dos del PP". Según los datos que expuso en su comparecencia, entre 2016 y 2019 fue contratada por el tripartito en seis ocasiones y cobró por ello 9.188 euros. En el mandato anterior, con el PP, percibió 14.222 euros por seis contratos, mientras que entre 2007 y 2011, también con los populares, recibió 6.400 euros. Con todo, Santiago afirmó que la "campaña de acoso" ya se inició cuando dio el paso de ir como número tres en la lista de Somos, con llamadas para que no se presentara o no recogiese el acta. Según la edil, luego llegaron "las represalias" que condujeron al "bloqueo y cierre de mis redes sociales a través de una denuncia masiva por suplantación de identidad".

Santiago también expuso que al día siguiente del Pleno del pasado día 8, especialmente bronco, se encontró su coche rayado y denunció el "acoso de ediles del PP, con alusiones machistas en las sesiones plenarias". "No lo voy a dejar y no me van a quebrar", añadió.

El PP, por su lado, "estudia en profundidad el contenido de las declaraciones tanto de la señora Santiago como de la señora Taboada" y se reserva "las acciones necesarias para garantizar el buen nombre" de todos sus concejales. "Queremos dejar claro que vamos a actuar con rigor y que llegaremos hasta el final para arrojar luz sobre este grave episodio", señala el edil popular Mario Arias en el comunicado.