La fábrica de armas de Trubia toca con la yema de los dedos el contrato de 2.083 millones de euros para los nuevos blindados 8x8 con destino al Ejército español. La ministra de Defensa, Margarita Robles, confirmó ayer en el Congreso de los Diputados que su departamento ya estudia con detalle una oferta conjunta de Santa Bárbara con Indra y Sapa -las firmas integrantes de la UTE que ultima los prototipos para este vehículo de combate- y confía en que se pueda aprobar tal propuesta "en breve". "Deseo fervientemente por el bien del Ejército, de la industria militar y de Asturias que podamos reiniciar el camino lo antes posible", subrayó Robles, poco después de definirse como "medio asturiana" por su ascendencia familiar paterna en Oviedo.

La nueva oferta liderada por Santa Bárbara, según indicó Margarita Robles, "satisface las necesidades del Ejército de Tierra" y también cumple los pliegos en lo que concierne al techo de gasto y al número de vehículos de serie (348). Todo ello, añadió la Ministra, "dentro de un marco temporal asumible y preservando las capacidades industriales nacionales". La titular de Defensa, que hizo hincapié en la importancia de este programa desde el ámbito del empleo, con la previsión de un millar de puestos de trabajo, también advirtió de que el plan de modernización militar seguirá adelante en el caso de que no prospere la oferta de Santa Bárbara con Indra y Sapa. "Este programa es una prioridad para el Ministerio y se hará sí o sí", indicó.

LA NUEVA ESPAÑA ya avanzó hace semanas que Santa Bárbara estaba trabajando para presentar ante Defensa una oferta por los 8x8 sin esperar a que el Ministerio abriese la nueva licitación pública que se anunció tras la primera ruptura con la filial de General Dynamics en vísperas de la pasada Nochebuena.

Según desveló ayer Margarita Robles, en aquella primera propuesta para los blindados, Santa Bárbara incurrió en 74 incumplimientos respecto al pliego de condiciones.