A principios del siglo XX empezaron a llegar a Asturias los primeros coches movidos por petróleo. En la segunda década, condicionada por la Primera Guerra Mundial, continuó modestamente el incremento del parque móvil. Fue en los años 20, cuando empezó a popularizarse el coche en nuestra región.
El 3 de octubre de 1902 ya hay noticias del primer accidente ocurrido en Ballota (Cudillero), cuando bajando una pendiente el coche que ocupaban el Conde de Peñalver y el Marqués de Teverga, sufrió una avería mecánica que motivó la pérdida del control y el consiguiente impacto que destrozó el vehículo, aunque sus ocupantes apenas sufrieron heridas de consideración. En los años 20, entre los automovilistas ovetenses y asturianos empezaron a desatarse desafíos en recorrer determinados tramos de carreteras contra reloj. Uni de ellos fue el de subir el puerto de Pajares o atravesarlo hacia la meseta.
El mayor obstáculo era superar la "Curva de la Casa", también conocida como "la del 17%". En dicha curva siempre hubo que remolcar con parejas de bueyes a las diligencias y otros carruajes de antaño. En invierno, incluso había que remolcar desde Flor de Acebos. Mientras tanto el 16 de mayo de 1926 se inauguraba el "Hotel Valgrande".
Los hermanos Salvadores, que regentaban un bar en el alto del Puerto desde el año 1925, atribuyen a miembros de las familias Sela y Figaredo, en 1926 aproximadamente, ser los primeros en cruzar en coche la raya con León. Recuerdan igualmente, que el conductor del primer camión que llegó al puerto procedente de Madrid, no se atrevió a bajar a Puente de los Fierros y dio la vuelta. Según los citados hermanos el primer camión que cruzó el puerto era de un pescadero de Gijón, transportando pescado a León todas las semanas. También recuerdan el primer accidente mortal en el puerto, en 1935, en el que falleció un vecino de Santa Cruz de Mieres, al romperse los frenos en Flor de Acebos.
El 31 de agosto de 1926 un coche de la compañía italiana O.M. (Officine Meccaniche) de Manuel Fernández, representante de la marca en Asturias, estableció el primer récord de subida a Pajares en 70 minutos, después de sufrir un pinchazo. Salió de Oviedo a las 6,10 y llegó al puerto a las 7,21 minutos, verificado el control cronómetro en mano por el Presidente del Automóvil Club ovetense Luis Corujo.
El 17 de Noviembre de 1922 una furgoneta de Gijón, cuyo propietario era José María Suárez, el que poco después construiría el Hotel Valgrande en Pajares y conducida por Antonio Fernández, se desplazaba de Gijón a León, acompañado del hijo de José María, de igual nombre y padre del ministro Fernando Suárez. Llevaban una bomba hidráulica de 1.000 kilos y en Flor de Acebos, se quedaron sin aceite. Durmieron la noche en la cabina de la furgoneta y al día siguiente a primera hora, José María se acercó a buscar aceite al alto del puerto y ya continuarían sin más incidentes hasta León y regreso a Gijón.
Probablemente, la primera vez que un coche marca "Gobrón" pasó por Pajares fue en febrero de 1902 con dos asturianos, ambos pilotos de aquella incipiente aviación de principios de siglo, Guillermo Guisasola Vigil y Jesús Fernádez Duro. Según informaba el desaparecido diario "Informaciones" de Madrid en enero de 1964, en unas declaraciones de Guisasola que contaba a la sazón 92 años. Los dos asturianos, asiduos de "La Gran Peña" de Madrid, habían realizado una apuesta con otros amigos de la tertulia para realizar un viaje entre Gijón y Madrid. Salieron de Gijón, de la calle del Carmen, domicilio de Guisasola, a las siete de la mañana, se subió el Pajares de un tirón y se hizo una breve parada en Valladolid, para llegar a Madrid a la Puerta del Sol, a las seis de la tarde, después de 11 horas y una media de 65 kilómetros por hora.
A Guisasola le acompañaban Jesús F. Duro, el conocido y malogrado aviador langreano, y el duque de Riansares. Guisasola tenia también el récord de ser el primero en subir en su viejo modelo "Delabaya" el Puerto de los Leones en el Guadarrama.
Por cierto que años después, el cirujano ovetense Luis Estrada, fue el primero en cruzar con un coche el túnel del Guadarrama antes de su inauguración oficial, filtrándose en una caravana de camiones paralizada por la nieve a la entrada del túnel.
