En los años 80, el Colegio de Aparejadores se interesó por la arquitectura de las casas de indianos dispersas por el Principado. Ese interés les llevó a encargar al fotógrafo Juanjo Arrojo reflejar con su cámara esas construcciones. El resultado quedó guardado y ahora se ha convertido en una exposición que ayer se inauguró en la sede del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos del Principado de Asturias bajo el título "Las casas que vinieron del mar".

En aquel recorrido, Arrojo fotografió alrededor de 3.500 construcciones. No había tecnología digital, así que todo quedó plasmado en unas 20.000 imágenes que el profesional entregó al Colegio de Aparejadores. Se da la circunstancia de que con el paso de los años se perdieron las fotografías que había tomando en el oriente asturiano, así que en la exposición se puede ver una treintena de imágenes de las mansiones principalmente del Occidente (Boal, Navia Valdés, El Franco?), de ahí el título, aunque también incluye alguna del centro asturiano, como Villa Radis, en Somao (Pravia), y Villa Julita, en Villalegre (Avilés).

Fue la actual junta directiva del Colegio, con Antonio Suárez Colunga en la presidencia, la que "consciente del valor cultural de esta recopilación de imágenes" decidió hacer la exposición.