El gobierno de Oviedo (PP y Cs) ha desbloqueado el contrato para la conservación de las calzadas de la ciudad y los caminos públicos rurales tras 18 meses de trámites, ya que la licitación se produjo en septiembre de 2018.

Se trata de un contrato muy necesario porque el mal estado de algunas calzadas del casco urbano, incluso del centro, resulta más que evidente. Y lo mismo se puede decir de numerosos caminos de las parroquias rurales. Las quejas vecinales han sido continuas durante los últimos meses.

Finalmente, tal y como informó este periódico, ha sido la empresa Alvargonzález la que se ha hecho con el encargo con un presupuesto máximo de 700.000 euros, lo que supone un 22 por ciento de rebaja sobre lo contenido en los pliegos de condiciones. El plazo de ejecución de los trabajos ha quedado establecido en un año, según consta en el acuerdo adoptado en el seno del equipo de gobierno.

El contrato incluye rebacheos; reparación del pavimento y reposición del firme en los caminos públicos de titularidad municipal; la limpieza, reposición y nueva construcción de obras de drenaje; la ejecución de muros de contención; obras de balizamiento y protección, y la reposición de marcas viales en calzadas de calles urbanas y caminos públicos.

El área de actuación comprende todas las calzadas de las calles de la ciudad y de los núcleos urbanos, así como todos los caminos y carreteras de Oviedo. Se actuará en función de los desperfectos y anomalías que surjan como consecuencia del deterioro del pavimento, el agotamiento del firme, las obras de fábrica o debido a causas que se pueden considerar fortuitas.

Los técnicos municipales han advertido de que el tipo de trabajos que se realizan con estas obras no permite la redacción de un proyecto técnico, puesto que se ejecutan en función de los desperfectos existentes y de los que van surgiendo día a día y que por su peligrosidad requieren de una intervención que, en ocasiones, puede ser inmediata. En consecuencia, no se puede localizar a priori la zona a reparar, que depende de los daños que se causen por el uso, las inclemencias meteorológicas o la ejecución de obras.