Los operarios de la empresa Sardesa -por encargo de la concejalía de Infraestructuras- ya han comenzado a sustituir el pavimento de la plaza Concha Heres por un tipo de suelo antideslizante, con el fin de evitar las numerosas caídas que se estaban produciendo en este punto de la ciudad, situado en el entorno de la calle Azcárraga. Las obras fueron adjudicadas en su día por un importe de 160.200 euros.

El objeto de estos trabajos, dirigidos por la concejalía que lidera el teniente de Alcalde Nacho Cuesta (Ciudadanos), es sustituir un pavimento "que se había mostrado claramente deslizante y peligroso en días de lluvia y que estaba provocando frecuentes caídas de viandantes". Las obras suponen, además, una mejora de este entorno urbano, muy transitado, entre otras cosas, por ser el acceso a un conocido centro deportivo que cuenta con muchos usuarios. "La idea es ofrecer un tránsito seguro y cómodo para los peatones", dicen fuentes municipales.

Las obras consisten en la sustitución del pavimento por uno de gres cerámico extrusionado y antideslizante que mejore la seguridad de los ciudadanos. La primera parte de esta obra ha consistido en la retirada del mobiliario urbano de la plaza -bancos, papeleras y bolardos, entre otros elementos- para proceder a la retirada del firme. El plazo de ejecución previsto es de tres meses.