Dicen los que le conocían que José Antonio García Arias era un hombre muy serio tanto en la vida como en el trabajo, pero todos lo destacan como una virtud y coinciden a la hora de señalar que era "un lujo" tenerlo como amigo porque cuidaba a los suyos como nadie. García Arias, que fue concejal del Partido Popular (PP) en Oviedo desde 1983 hasta 1987, falleció el pasado jueves, a los 78 de edad, víctima de una enfermedad. Las medidas de seguridad establecidas por la crisis del coronavirus no le permitieron a la familia organizar un funeral que hubiera sido multitudinario por la trayectoria del fallecido.

Ingeniero de caminos, canales y puertos, era componente de una familia en la que la política siempre estuvo presente. De hecho, José Antonio García Arias era concejal en Oviedo por el PP al mismo tiempo que su hermano César ejercía como alcalde de Teverga por el PSOE. "Él se presentó como independiente y nunca estuvo afiliado al partido, pero evidentemente tenía ideas diferentes a las mías. No obstante, era el mayor de seis hermanos y en casa nunca hubo una palabra más alta que otra por cuestiones políticas. Siempre lo recordaré como un ejemplo y como una gran persona, muy práctico y muy ecuánime", explica César García Arias. Ambos son, además, primos carnales de Ludivina García Arias, que fue diputada del PSOE a nivel nacional.

Antonio Masip, que era el alcalde cuando el fallecido estaba de concejal en Oviedo, también tiene buenas palabras para José Antonio García Arias. "Aunque estaba en la oposición, siempre confié en él y ayudó mucho a reforzar el Ayuntamiento", dice.