El "plan Canteli" para convertir el Naranco en uno de los principales reclamos turísticos y de esparcimiento para los vecinos de Oviedo debe esperar. Una de las consecuencias de la crisis sanitaria para el Consistorio ovetense ha sido la paralización de los planes de empleo. Esto implica que la intención de poner en marcha a partir de abril un ambicioso proyecto de un año de duración para limpiar y señalizar todos los puntos de interés del monte totémico de la ciudad queda "aparcada hasta nuevo aviso", explican las fuentes consultadas.
Tal y como desveló LA NUEVA ESPAÑA, la concejalía de Economía, dirigida por el popular Javier Cuesta, decidió este año dedicar los 3,33 millones de euros del plan de empleo a acometer "una recuperación integral" del Naranco. La partida permitirá contratar a 94 trabajadores con el fin de adecentar sendas, señalizar los puntos de interés y promocionar el turismo y la diversión en este espacio natural.
La intención municipal era meter mano, a partir de abril, a 81 kilómetros de sendas que conectan el monte con los diferentes barrios situados en su falda. Dichos planes incluyen la colocación de hasta 25 bancos rústicos y varios indicadores, tanto en el propio monte como en espacios públicos de la ciudad, destacando el Campo San Francisco.
Sin embargo, una de las decisiones tomadas a raíz del real decreto de estado de alarma aprobado por el Gobierno central ha sido la de paralizar los planes de empleo, tanto los vigentes como los que estaban previstos de empezar. Esto, en la práctica, supone que ya se han dejado de lado las labores del plan iniciado el año pasado para adecentar varias parcelas municipales. Del mismo modo, los procesos de selección para el del Naranco quedan en suspenso hasta nuevo aviso.
Queda ahora por ver cómo afectará la paralización de los planes cofinanciados por el Principado y los ayuntamientos a las partidas. Javier Cuesta anunció recientemente que el Consistorio devolverá 700.000 euros correspondientes al plan de empleo de 2018 por demorarse su inicio en varios meses respecto al plazo establecido. Igualmente, el edil sostuvo que se esperaba una reclamación similar para el último plan de empleo iniciado en agosto de 2019 cuando debía haber comenzado ya en abril.
Cuesta culpó en ambos casos a su antecesor en el cargo, el edil de Somos Rubén Rosón. A diferencia de los dos últimos años, en esta ocasión el Principado ha suspendido todos los plazos legales, pero todavía no se sabe si en este caso la demora afectará a recortes en los planes de empleo proporcionales a los meses sin ejecutar o si simplemente se aplazarán, manteniendo las partidas comprometidas.
El gobierno municipal ha decidido renunciar al plan especial previsto por el tripartito para el Naranco. Sin embargo, ello no supone el abandono de algunas de las principales actuaciones previstas ya hace un cuarto de siglo y que no llegaron a cristalizar.
Los arquitectos encargados de la revisión del Plan General de Ordenación (PGO) que está en marcha y cuya redacción se quiere impulsar de manera inmediata por parte de la concejalía de Urbanismo proponen una amplia gama de propuestas para el Naranco. La mayoría de ellas se recogen ya en el plan redactado hace más de un cuarto de siglo por Ramón Fernández-Rañada, uno de los urbanistas que conforman el equipo encargado de reformar ahora el planeamiento y en el que también figuran Víctor García Oviedo y Emilio Rico. Su objetivo es que la capital de Asturias deje de vivir "de espaldas" a su emblemático monte, fomentando su conservación y una promoción turística sostenible.
