El barrio de Vetusta celebrará este año sus fiestas de primavera en otoño, con la esperanza de que para entonces ya no haya restricciones derivadas de la crisis del coronavirus. Los promotores habían fechado este año sus ya tradicionales fiestas entre los días 5 y 8 de junio, pero finalmente han optado por aplazar el inicio de las celebraciones hasta el 16 de octubre.

Los responsables de los festejos en los barrios dan ya por perdidas todas las citas del calendario fijadas para los meses de mayo y junio, aunque de momento solo han optado por la cancelación los organizadores de la fiesta de Primavera de Trubia y los de la de La Manjoya, ambas previstas entre este y el mes siguiente. Entre los que resisten se encuentra Buenavista, quienes todavía no han tirado la toalla de poder sacar adelante sus festejos en mayo.

Las comisiones están satisfechas con el Ayuntamiento respecto a la tramitación de los permisos. Habían solicitado facilidades para poder tener listas las autorizaciones en caso de que se levantara el estado de alarma y aseguran que actualmente la administración local está respondiendo a su petición y se están dando los pasos necesarios para la obtención de las licencias.

De todos modos, las previsiones son pesimistas. El hecho de que el Ayuntamiento dé por perdida la feria de la Ascensión y se esté planteando ya incluso la suspensión de San Mateo echa para atrás a los organizadores de eventos más pequeños. "Las previsiones que manejan no deben ser muy halagüeñas", comentan desde los colectivos organizadores de festejos.

El Ayuntamiento de Oviedo preveía la celebración a lo largo de este año de más de un centenar de fiestas, en su gran mayoría fijadas entre los meses de marzo y noviembre. La aprobación del real decreto de estado de alarma ha truncado ya la celebración de una parte de estas citas y si se alarga mucho en el tiempo puede afectar tanto a la celebración como a los preparativos de las fiestas previstas en la segunda mitad del presente ejercicio.