Oviedo apurará al máximo para tratar de salvar las fiestas de San Mateo. El Consistorio anunció ayer la cancelación de la hoguera de San Juan, prevista para la noche del 23 de junio, y la Jira al Naranco, programada para cinco días después, pero mostró su disposición a celebrar "sí o sí" San Mateo, adaptándose a las exigencias sanitarias tanto del Principado como del Gobierno central. La concejala Covadonga Díaz asegura que estudia varias alternativas, entre ellas mantener los conciertos en la Losa como escenario central, pero esperará hasta mediados de junio para decantarse por alguna de las opciones, basándose en criterios puramente sanitarios.

"Si hay algún riesgo para la salud daremos un paso atrás, porque es nuestra prioridad", advierte la edil de Festejos, muy crítica por la falta de criterios claros por parte de las autoridades sanitarias respecto a las grandes celebraciones. Díaz prevé sacar a licitación los pliegos de las celebraciones como muy tarde "a primeros de julio", pero para ello precisa conocer con un par de semanas de antelación las limitaciones que existirán entre los días 11 y 22 de septiembre.

El Consistorio dice estar preparado para todo. A priori, a partir de la fase 3 solo se prevén espectáculos al aire libre de unas 800 personas sentadas. No obstante, el equipo de gobierno local exige saber si esas pautas se mantendrán para el final del verano. "No sabemos si esas condiciones seguirán siendo las mismas en septiembre y si se pueden organizar eventos con gente de pie", se lamenta Díaz, que todavía estudia la posibilidad de celebrar un San Mateo normal. "Si se puede, habrá un escenario central en la Losa y se mantendrán los chiringuitos y los escenarios como el año anterior", indicó, para luego matizar que ese es solo uno de los escenarios en los que trabajan. "Crear pequeños escenarios en los barrios es una opción posible para adaptarse a las restricciones", asegura.

Desde el gobierno local aseguran estar viviendo jornadas frenéticas intentando adaptarse a todas las vías posibles y contactando con otras ciudades como Valladolid y Santander para conocer cómo plantearán ellos sus festejos. "Estamos todos igual, pendientes de lo que nos diga Sanidad", subraya Díaz, al mismo tiempo que recuerda que en Gijón "retiraron los pliegos de las fiestas debido a la incertidumbre que existe".

El anuncio de Festejos llegó justo después de una comisión municipal en la que el edil socialista Diego Valiño preguntó por los planes municipales de cara a las fiestas de San Mateo. La concejala asegura que se limitó a supeditar las condiciones de la celebración a la decisión de las administraciones competentes en materia sanitaria; en este caso, el Principado y el Gobierno central.

Sin opciones de supervivencia están ya las celebraciones de la hoguera de San Juan, cuya cancelación será llevada a la Junta de Gobierno esta misma semana, y la romería de la Jira al Naranco. El Ayuntamiento ha optado por no organizar unos eventos que prevé multitudinarios y propicios para aglomeraciones en un escenario de desescalada en el que, de momento, solo se permiten reuniones de quince personas, y en el que los espectáculos al aire libre solo pueden seguirse sentados y con distancia de seguridad.

"Rigor y legalidad"

El Ayuntamiento argumenta su postura en la necesidad de "poner la salud por delante" y organizar las celebraciones "con rigor y legalidad", aspectos estos últimos por los que Covadonga Díaz dice ponerse una fecha límite para decidir el futuro de San Mateo. "No queremos organizar las fiestas en quince días como otros hicieron algún año", sentencia, lanzando una crítica al anterior gobierno municipal.