Los conductores afectados por las multas irregulares del radar de La Bolgachina deberán esperar al menos hasta final de año para recuperar su dinero. Es el plazo que se da la Dirección General de Tráfico (DGT) para poner en marcha un sistema telemático capaz de automatizar los trámites para acceder al reembolso de gran parte de las 15.844 sanciones que se comprometió a devolver el pasado enero. Fue la consecuencia de que Samuel Morán, un vecino de Ribera de Arriba, demostrase unos meses antes, en octubre, que el dispositivo era ilegal, como también publicó LA NUEVA ESPAÑA.
Fuentes de Tráfico en Madrid justifican la demora en la tramitación administrativa por la imposibilidad de gestionar una a una las multas, al tratarse de un número muy elevado. "Ir sanción a sanción supondría un caos organizativo", argumentan, al tiempo que garantizan el reembolso de las cantidades cobradas en su día a los conductores. Se trataba de vehículos captados por el radar a más de 90 kilómetros por hora en una zona en la que el límite eran 120, pues las cámaras fotografiaban a los turismos más allá de una señal de fin prohibiciones que elevaba la velocidad máxima permitida.
La DGT admitió el error y anunció la anulación de 15.844 multas desde 2016. A pesar de que el radar fue colocado en 2007 y desde su primer día de funcionamiento puso multas ilegales, la administración se aferra a la prescripción de este tipo de trámites administrativos para no tener que devolver las multas de los nueve años previos. Desde la Unión de Consumidores de Asturias (UCE) se opusieron a ese criterio y exigieron, sin éxito hasta la fecha, extender el efecto de la medida a todos los afectados durante doce años.
El retraso en la devolución implica únicamente a las personas que ya abonaron en su día la cuantía de la sanción. En el caso de los conductores a los que se les había abierto expediente, pero todavía no habían pagado, ya en febrero les empezaron a llegar cartas para comunicarles la anulación de las sanciones, eximiéndoles definitivamente de su pago.
Tráfico apuntó inicialmente a la paralización de los trámites administrativos a causa del decreto de estado de alarma como motivo de la paralización de las devoluciones, pero ahora señala que todo se debe simple y llanamente al diseño de una herramienta para la que, aseguran, se precisa del visto bueno de varias "patas" de la administración entre las que estarían, además de Tráfico, los servicios tributarios y otras áreas implicadas en la gestión de las arcas del Estado.
