Solo faltan el sol y la buena temperatura. El club de campo del Centro Asturiano de Oviedo, en el Naranco, abrió ayer al público sus tres piscinas exteriores. Lo hizo con todas las medidas de protección, entre las que destaca que se ha parcelado el prado donde los usuarios toman el sol. La zona verde se ha dividido en cuadrículas de dos por dos metros con una distancia de metro y medio entre cada una de ellas, para mantener la distancia de seguridad.
En las tres piscinas exteriores del Centro Asturiano se ha reducido a un tercio el aforo de bañistas. De este modo, en la piscina grande solo se podrán bañar a la vez un total de 65 bañistas y en la mediana solo podrá haber 30 personas en el agua. En la piscina para bebés menores de 3 años serán los socorristas los que decidan cuándo hay demasiados pequeños. Los niños deberán estar acompañados siempre por un adulto, uno solo, y este debe utilizar mascarilla.
El Centro Asturiano ha reforzado el número de trabajadores en las piscinas exteriores de sus instalaciones. Así se duplican los efectivos, con dos socorristas, dos acomodadores y dos personas encargadas de la limpieza de los vestuarios. Los acomodadores serán los encargados de indicar a los usuarios las parcelas que están libres e informarles de las condiciones de uso de la piscina.
Ayer no tuvieron mucho trabajo, ya que tan solo una niña acudió durante las primeras horas de la mañana a darse un chapuzón, según comentó David Maseda, uno de los socorristas que trabajan en las piscinas del Centro.
El socorrista explicó también que los socios podrán utilizar la zona de tumbonas, "que serán desinfectadas después de cada uso".
La idea de los responsables del Centro Asturiano es que sus socios puedan disfrutar de las instalaciones garantizando todas las medidas se seguridad.
Las piscinas exteriores del club han abierto el mismo día, 15 de junio, que en años anteriores.
