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Quitar las casetas de San Mateo será "la puntilla al sector", advierte la hostelería

Los chiringuitos aceptan la decisión por motivos sanitarios, pero piden que no sea "una excusa" para hacerlos desaparecer de las fiestas

Los hosteleros ven "precipitada" la decisión del Ayuntamiento de Oviedo de suspender la mayor parte de las fiestas de San Mateo, en especial la eliminación de los chiringuitos y de las casetas de hostelería del paseo del Bombé. David Codón, responsable en Oviedo de la Asociación de Hostelería de Asturias (Otea), considera que el Ayuntamiento podría haber buscado otras soluciones ante la crisis del coronavirus. "Lo fácil es prohibir y lo complicado, buscar soluciones", criticó. En su opinión, el acuerdo de la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Oviedo que limita al máximo la celebración de las fiestas de la capital "es una decisión precipitada" que supone "la puntilla" para un sector, el hostelero, "que ya lo está pasando muy mal". (Consulta aquí el calendario de festejos suspendidos).

Los hosteleros ovetenses cerraron el San Mateo del año pasado encantados con el éxito de las casetas del Bombé. Un éxito que este año no podrán repetir, ya que el Consistorio ha decidido eliminar estos puestos para evitar aglomeraciones. En opinión de Codón, antes de anunciar que no habrá casetas "se podría haber trabajado en un plan alternativo".

El representante de Otea en Oviedo ofrece al Ayuntamiento la colaboración del sector para revertir la situación. "Faltan tres meses y aún estamos a tiempo de diseñar un plan alternativo", insistió. En su opinión, "dar cerrojazo a San Mateo es lo peor que le podía pasar a la hostelería ovetense", por eso cree que aún se está a tiempo "para que el presupuesto que se iba a dedicar a San Mateo se utilice para buscar un modelo que permita a los ovetenses disfrutar de las fiestas y de la hostelería de su ciudad".

No obstante, la concejala de Festejos, Covadonga Díaz, abrió ayer la puerta a cierta participación de la hostelería ovetense en las fiestas de San Mateo de este año. La edil apuntó que el Ayuntamiento y los técnicos municipales están estudiando la posibilidad de permitir a los locales sacar barras a la calle durante el periodo festivo.

Desde los chiringuitos se ha aceptado la decisión municipal atendiendo a razones sanitarias, pero están temerosos de lo que pueda ocurrir en el futuro. Eduardo Álvarez, uno de los responsables de La Guinda, uno de los chiringuitos que llevan más de 30 años participando en las fiestas de San Mateo, entiende la situación: "Fundamentando la decisión en cuestiones sanitarias no la veo mal". Pero a renglón seguido añade: "Espero que no haya nada detrás para acabar con los chiringuitos el año que viene". El PP, partido en el gobierno en coalición con Ciudadanos, ya ha manifestado en numerosas ocasiones su rechazo al modelo de chiringuitos en San Mateo, y los responsables de los establecimientos temen que la crisis del coronavirus sirva como "excusa" para que en años venideros tampoco se permita la instalación de estas barras. "Aceptamos no estar este año, pero espero que no se guarden un as en la manga para el año que viene no contar con nosotros sin ningún tipo de explicación". De la misma opinión es David Fernández, del Pinón Folixa. "La cancelación es una decisión global, no solo de Oviedo, y se hace para evitar rebrotes", explicó. Aun así, desde este chiringuito apuntan la misma sensación, la de estar "temerosos" con las decisiones de los próximos años.

En los chiringuitos sociales, los que se instalaron durante los tres últimos años en la Corrada del Obispo, la crítica al Consistorio es otra. Del mismo modo que los tradicionales respetan la decisión municipal de que no se instalen las casetas este año, pero se quejan de que nadie les haya consultado antes de tomar una iniciativa tan drástica y tampoco se les ha informado de que este año no estarán en San Mateo.

Desde La Folixaria, uno de sus responsables, Álvaro Villegas, ejerce de portavoz para asegurar que son "los primeros en entender la situación de crisis sanitarias en la que estamos", pero también en afear "que se tome una decisión tan importante para las fiestas de la ciudad de manera unilateral, sin consultar con los colectivos y asociaciones implicados". "En nuestra asociación hay muchos profesionales sanitarios que han estado en primera línea de la lucha contra la pandemia y podríamos haber colaborado con el Ayuntamiento en buscar una solución alternativa para que Oviedo pueda seguir disfrutando de unas fiestas populares", aseguró Villegas en nombre de sus compañeros.

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