Alfredo Canteli cumplió ayer con la visita que tenía pendiente a la fábrica de armas de Trubia y salió convencido de que es el lugar donde el ejército español tiene que fabricar sus nuevos blindados, tal y como está previsto en el contrato por el que lucha ahora Trubia asociada con las empresas Indra y Sapa: "No tendría que sentido que el 8x8 se fabricara lejos de Trubia", concluyó Canteli en referencia al concurso para los Dragón, cuyos primeros prototipos están esperando fecha para pasar las primeras pruebas.

En su recorrido por la factoría trubieca el alcalde de Oviedo estuvo acompañado por Juan Escriña, director general de General Dynamics European Land Systems (GDELS)-Santa Bárbara Sistemas y por Sergio Menéndez, director de transformación industrial de la fábrica.

Al acabar el recorrido por los talleres, Alfredo Canteli lanzó un mensaje al Ministerio de Defensa, pidiéndoles que tengan en cuenta "el enorme potencial que ha demostrado la factoría en los últimos años, situándose en el mercado internacional, y que apueste por la industria nacional para la fabricación de los blindados, sería la mejor decisión y la que ayudaría a mantener miles de empleos en Oviedo y en Asturias".

El alcalde repasó algunas cifras de la operación. "Estamos hablando", dijo, "de generar alrededor de 12.000 puestos de trabajo directos e indirectos y de una inyección para el tejido industrial ovetense y asturiano que contribuiría a consolidar el municipio y la región como referente a nivel europeo en el sector de la seguridad y defensa durante los próximos años". Canteli también ensalzó la antigüedad de la fábrica y "la capacidad tecnológica que ha demostrado en el último siglo, adaptándose a las necesidades de un mercado complejo y exigente, generador de riqueza y que ha supuesto en las últimas décadas un motor económico en nuestro municipio".

La visita de Canteli llega después de que hace pocas semanas el Consejo de Ministros dejara prácticamente cerrado el encargo a Trubia, garantizando carga de trabajo para, al menos, los próximos siete años. El Gobierno de Pedro Sánchez autorizó a finales de junio el gasto de 2.083 millones de euros para contratar un paquete de 348 vehículos de combate 8x8 a la sociedad conformada por Santa Bárbara, Indra, Escribano y Sapa. De forma directa, la operación supone la creación de 300 puestos de trabajo en la factoría ovetense desde finales de este año hasta 2023. Esta misma semana se tenían que haber empezado a probar los prototipos, aunque las altas temperaturas impidieron iniciar el test.