El traslado del Instituto de Productos Lácteos de Asturias (IPLA) de Villaviciosa a Oviedo no es un capricho. La parcela de unos 52.000 metros cuadrados donde se radicará la nueva sede permitirá levantar un edificio con una superficie útil de unos 4.500 metros cuadrados, lo que supone más del doble de los 1.800 metros con los que cuentan las actuales dependencias de Villaviciosa.
El proyecto redactado por la empresa Jovino Martínez Sierra Arquitectos a través de un contrato de 155.500 euros prevé dotar a los profesionales de la institución de unas instalaciones modernas y amplias para desarrollar su labor y favorecer los intercambios de impresiones con investigadores de otras dependencias de la ciudad.
Si bien el plazo de las obras inicial es de año y medio, no se descarta que los trabajos para acondicionar el espacio que ocuparán inicialmente unos 60 trabajadores provenientes de Villaviciosa se alargue durante medio año más.
