El hombre de 73 años que estaba acusado de abusar sexualmente de su nieta en Oviedo desde que la niña tenía siete años reconoció ayer los hechos que le imputaba la Fiscalía y la acusación particular y aceptó una condena de cinco años y un día de prisión. La pena también incluye seis años de alejamiento y la prohibición de comunicarse con la víctima por ningún tipo de vía, así como cinco años de libertad vigilada. La vista oral estaba señalada en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, pero el reconocimiento de los hechos por parte del acusado evitó su desarrollo. La víctima, nacida en el año 2001, tiene ahora 19 años y sufrió los abusos por parte de su abuelo entre los siete y los doce.

Según el relato del fiscal, en fechas situadas entre los años 2008 y 2013, el condenado acudió en diversas ocasiones al domicilio de la pequeña. Solía ir los sábados y lo hacía para cuidar de la niña y de su hermano cuando los padres tenían que irse a trabajar. La Fiscalía defiende que el procesado aprovechaba esos momentos y la confianza que le daba la familia para sobrepasarse con la niña. El hombre también reconoció haber cometido actos similares en su propia casa, cuando la víctima acudía allí por algún motivo.

Los abusos comenzaron presuntamente cuando la niña tenía siete años. La Fiscalía denuncia que el hombre, "aprovechando la relación de parentesco y la relación de confianza" que tenía con la pequeña abusó sexualmente de ella en diversas ocasiones. A consecuencia de estos hechos, la víctima se vio obligada a iniciar un tratamiento psicológico que dio comienzo en el año 2019, según acreditó la abogada de la acusación, ejercida por la abogada Ana María González, del Centro de Atención a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos (Cavasym).

El Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo ya había dictado un auto el 9 de febrero de 2019 imponiéndole algunas medidas al acusado. El septuagenario ya no podía aproximarse a menos de 500 metros del domicilio de la menor, a su centro de estudios o a cualquier lugar frecuentado por ella. La Fiscalía considera que los hechos que reconoce el hombre de 73 años son constitutivos de un delito continuado de abusos sexuales a una menor de trece años y de ahí los cinco años de condena.

Tras reconocer los hechos, el acusado aceptó una condena de 5 años y 1 día de prisión, inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena así como la prohibición de acercarse a la joven a una distancia inferior a 500 metros, a su domicilio o cualquier otro lugar en que se encuentre durante seis años. El condenado también asumirá la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio durante el mismo espacio de tiempo, y la medida de libertad vigilada durante cinco años, que se ejecutará con posterioridad a la pena privativa de libertad. Además, el hombre de 73 años abonará las costas del juicio.

Por otro lado, en concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Fiscal pedía que el acusado indemnizase a la víctima con 6.000 euros "para compensar los daños", pero la joven renunció al dinero antes de que se celebrase el juicio y de que su abuelo reconociese los hechos que lo llevarán a prisión. No en vano, admite haber abusado de su nieta en varias ocasiones en un periodo de cinco años.