Los feriantes asturianos tomaron ayer las calles del centro de Oviedo para exigir ayudas económicas destinadas a un sector especialmente dañado por la crisis del coronavirus. Alrededor de sesenta vehículos -en su mayoría camiones y furgonetas que se utilizan para transportar las barracas- partieron del entorno del Carlos Tartiere y recorrieron la ciudad hasta llegar a la zona del Campo San Francisco. Una vez allí, dieron dos vueltas al parque sin parar de hacer sonar el claxon y con alguna que otra bocina. Al frente de la comitiva estuvo el tren turístico que suele funcionar en Oviedo en fechas como San Mateo. Una vez finalizado el recorrido, los feriantes acudieron a pie a manifestarse frente al edificio de Presidencia. "Haremos lo que haga falta porque hay familias que ya no tienen ni para comer y están acudiendo a Cáritas", asegura Saúl Olivar, que ayer hizo de portavoz de los feriantes.

Olivar afirma que las familias asturianas que viven de este tipo de negocios están atravesando situaciones "muy delicadas" y exige que las administraciones tomen cartas en el asunto. "La pandemia nos ha cogido por sorpresa y es cierto que se está pasando mal en muchos sectores, pero el nuestro es especial. En la mayoría de las casas los componentes de las familias tienen profesiones distintas y si uno está en paro el otro puede sostener la situación con su sueldo. Pero entre los feriantes no es así, aquí toda la familia trabaja en lo mismo y todos estamos sin cobrar un euro", dice Saul Olivar. "Si no nos dejan trabajar deberían ayudarnos de alguna u otra forma. No hemos sido tomados en cuenta como lo han sido los integrantes de otros sectores que sí están recibiendo apoyos", añade.

Oviedo fue el escenario elegido por los feriantes del Principado, pero las manifestaciones del gremio se están repitiendo en muchas ciudades del país. Una de las más numerosas tuvo lugar en Madrid. Allí, en la capital de España, los propietarios de barracas y de otros negocios ligados a las ferias reivindicaron un derecho que, según sostienen, les pertenece por ley. "El Real Decreto Ley 21/2020, de 9 de Junio, establece en su artículo 14 que a partir de la finalización del estado de alarma se podrán reiniciar las actividades recreativas y espectáculos públicos, siendo las administraciones competentes las que deban asegurar que se realizan cumpliendo con las normas de aforo, desinfección, prevención y acondicionamiento que éstas determinen, garantizando en todo caso una distancia interpersonal de 1,5 metros, así como el debido control para evitar aglomeraciones", explica Saúl Olivar. Sin embargo, critica que las autoridades están cancelando las ferias y verbenas populares de todo el país "sin previo aviso" a un sector que da de comer a unas 30.000 familias.