La concejalía de Urbanismo e Infraestructuras, liderada por Nacho Cuesta (Cs), está modificando los pliegos de condiciones del contrato para culminar la rehabilitación del kiosco de la música del paseo del Bombé. El objetivo es que las empresas asturianas del sector muestren interés por una licitación que ha quedado desierta en primera instancia. Una de las medidas previstas, según ha podido saber LA NUEVA ESPAÑA, consiste en incrementar el presupuesto estimado de la obra, que se había fijado en 290.000 euros.
Además, el departamento de Cuesta también va a dar luz verde a la ampliación del plazo para la presentación de ofertas, de modo que se facilite la preparación de las propuestas, así como a cambios en los criterios de solvencia técnica y en las valoraciones de las ofertas. El objetivo es que los nuevos pliegos estén listos para la semana próxima y que los trabajos puedan adjudicarse a lo largo del mes de agosto. La mejora del Campo es una de las prioridades de área de Infraestructuras.
Las obras del kiosco quedaron paralizadas hace cinco años, tras un desencuentro entre el Ayuntamiento y la empresa, y no se retomaron desde entonces. Se trata de una construcción centenaria de Juan Miguel de la Guardia, el gran artífice de la renovación urbanística que experimentó la ciudad en el cambio del siglo XIX al XX, que está inmersa en un proceso de abandono y deterioro cuando menos preocupante.
Tras haber sido objeto de varias reparaciones previas, el gobierno municipal, presidido entonces por Agustín Iglesias Caunedo, contrató en septiembre de 2014 una nueva actuación para la rehabilitación del kiosco. Los técnicos habían detectado desplomes y movimientos en la estructura a causa de la oxidación y la corrosión. Los trabajos, adjudicados en 241.000 euros, quedaron paralizados en 2015 por diferencias con la empresa.
Pese a las iniciativas emprendidas desde entonces por el Ayuntamiento, la actuación sigue pendiente un lustro después.
