El Gobierno de Oviedo (PP y Cs) considera "un éxito" el modelo implantado el pasado año y, para "competir con las principales ciudades españolas", ha decidido doblar el presupuesto destinado a la iluminación festiva y de Navidad. A instancias de la Concejalía de Infraestructuras, la Junta de Gobierno acaba de autorizar la contratación del alumbrado especial para eventos como San Mateo, Carnaval, la Ascensión y, sobre todo, las fechas navideñas con un gran incremento de la dotación económica. A fin de "conseguir una notable mejoría en la iluminación ornamental, lo que redundará en una mayor afluencia de visitantes", subrayan fuentes municipales. El coste base de la licitación pasa de los algo más de 430.000 euros de 2019 hasta los 800.000 euros.
Tras destacar la "buena experiencia de las pasadas navidades, en la que se cambió y mejoró el diseño del alumbrado festivo con formatos mucho más originales y espectaculares que en años anteriores", la concejalía que dirige Nacho Cuesta (Cs) quiere "seguir por esa misma línea y conseguir que la iluminación festiva de la ciudad se convierta en un atractivo de primer orden". El teniente de alcalde y edil de Infraestructuras considera que "ahora más que nunca hay que potenciar el atractivo que tiene Oviedo, y una iluminación festiva singular y espectacular es un gancho para atraer visitantes". "Lo vimos en las pasadas navidades, con una ciudad más llena de gente que nunca" añadió Cuesta.
El edil de Infraestructuras destaca, ante todo, el beneficio económico que espera de esta apuesta por la iluminación ornamental. "Una ciudad que sepa potenciar su atractivo turístico está contribuyendo a la mejora de su economía y fomentando la actividad y la creación de empleo en comercio y hostelería. Por eso, apostamos por mejorar el contrato de iluminación y por obtener unos resultados singulares que nos permitirán competir con las principales ciudades españolas", indicó Cuesta.
Aunque también se realizó un esfuerzo especial de iluminación en otros puntos de la ciudad y del municipio, las instalaciones ornamentales de luz más espectaculares de la pasada Navidad se concentraron en la calle Pelayo, con un llamativo túnel de alumbrado, y en los ejes comerciales de sus inmediaciones. La novedad para las fiestas de este año, cuya organización irá en función de cómo evolucione la pandemia, descansa sobre la creación de dos zonas singulares de iluminación navideña. Una de ellas ocupará las calles del centro y la otra es para puntos emblemáticos de los barrios.
