El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Oviedo, Nacho Cuesta (Cs), aseguró ayer que la propuesta de edificabilidad a la baja de los arquitectos que se encargan de la revisión del Plan General de Ordenación (PGO), adelantada por LA NUEVA ESPAÑA, está "abierta" a las aportaciones de vecinos y constructores. Podría modificarse, por ejemplo, durante el proceso de información pública, en el caso de que haya interés de los propietarios de suelo o de promotores para el desarrollo de ámbitos que, en principio, no serían considerados como urbanizables.
"El actual plan recoge las expectativas y previsiones de mercado de hace casi veinte años, por lo que se ha quedado obsoleto y, además, no se ajusta a la normativa medioambiental, que no existía a la hora de construir viviendas hace dos décadas", subraya Cuesta para justificar el proceso en marcha. A pesar de que los arquitectos ya han realizado sus cálculos y abogan por reducir en el nuevo planeamiento casi 8.000 viviendas respecto al aprobado en 2006, el concejal asegura que "aún estamos definiendo con el equipo redactor del nuevo PGO qué edificabilidad es la más adecuada para nuestra ciudad en el momento actual, con la nueva normativa y las posibilidades reales de ámbitos desarrollables, siempre tratando de recoger las expectativas de los propietarios que compraron hace años con arreglo al plan anterior".
Cuesta añade que "la revisión de ese PGO que tiene casi 20 años es absolutamente irrenunciable, ya que estamos en un escenario muy distinto, tanto en la fisonomía de la ciudad como en los cambios de legislación que se han llevado a cabo desde entonces". "Ya hemos señalado que el documento de prioridades que se va a aprobar será más abierto que el que estaba previsto. De esa manera, podrá recoger muchas aportaciones, tanto del sector de la promoción y de la construcción como de los propietarios particulares y vecinos de Oviedo", añadió el edil de Urbanismo, que busca "un documento abierto, con capacidad para recoger propuestas sectoriales y vecinales". Y es que, según el también teniente de alcalde, "el plan que pilote el urbanismo de los próximos años en Oviedo debe ser de todos los ciudadanos".
Cuesta garantiza que todas esas aportaciones de los constructores y de los vecinos "se recogerán en el periodo de información pública, posterior a la aprobación del documento de prioridades, que esperamos tener listo este otoño y que incluirá las sugerencias que, sin duda, enriquecerán el nuevo planeamiento".
Respecto a la reserva de vivienda protegida en el nuevo PGO, Cuesta asegura que se va a cumplir lo que marca la legislación vigente. Según el texto refundido de la ley del Suelo de 2015, resulta obligatoria una reserva del 30 por ciento en las nuevas promociones a desarrollar en suelo urbanizable. En aquellos suelos urbanos que vayan a ser sometidos a renovación sería del 10 por ciento. La idea inicial de los redactores del plan, y así figuraba en el borrador del documento de prioridades que se culminó en la fase final del pasado mandato, es que las viviendas de protección se distribuyan por promociones de toda la ciudad, a fin de evitar guetos. El último bloque residencial de este tipo se levantó en El Campón. El Ayuntamiento y el Principado acaban de entregar las llaves a los beneficiarios.
La propuesta de los redactores del nuevo planeamiento, adelantadas ayer por este diario, elimina 7.663 viviendas previstas en el documento original, de las que 4.310 son unifamiliares y 3.353 de edificios de varias alturas. Si el plan actual reserva suelo para levantar un total de 36.141 viviendas en la ciudad, los arquitectos reducen la cifra a 28.478. Serían, en total, 2.515 chalés y 25.963 pisos.
El equipo redactor del plan -integrado por Víctor García Oviedo, Ramón Fernández Rañada y Emilio Rico- estima que, como máximo, en los próximos años se construirán 15.000 viviendas en el municipio. Es la mitad de las que se recogen en la propuesta, con un margen más que suficiente para el caso de que haya un espectacular repunte de la construcción en Oviedo. Los urbanistas estiman que, como mucho, se harán 572 chalés y 14.429 pisos.
A la hora de justificar el recorte en la edificabilidad que proponen, los arquitectos destacan que el planeamiento vigente se elaboró con previsiones realizadas antes o durante el año 2006. Es decir, justo en el momento en que la burbuja inmobiliaria alcanzaba su máximo esplendor. Los redactores del PGO aprobado hace catorce años trabajaron con la previsión de que Oviedo iba a captar toda la demanda de vivienda de Asturias, hasta llegar a los 400.000 habitantes. Además, los arquitectos también advierten de que en el PGO en vigor un buen número de viviendas está en zonas inundables y que todas ellas van a salir del planeamiento.
