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El Ayuntamiento de Oviedo quiere dotar de bajos comerciales el Palacio de los Deportes

Nacho Cuesta asegura que este año se licitará el proyecto para una "reforma integral" que permita lograr un pabellón "multiusos"

El Palacio de los Deportes de Oviedo. LUISMA MURIAS

El Palacio de los Deportes que salga de la rehabilitación integral que prepara el gobierno municipal será un espacio multiusos en el que podrán realizarse actividades extradeportivas con carácter puntual y en cuyos bajos podrían habilitarse espacios comerciales. Según confirmó ayer a LA NUEVA ESPAÑA el concejal de Infraestructuras y primer teniente de Alcalde, Nacho Cuesta (Cs), se están ultimando los pliegos del proyecto de reforma, con el objetivo de que salga a licitación antes de que concluya el presente ejercicio.

"Vamos a llevar a cabo la necesaria remodelación integral de un equipamiento deportivo emblemático de nuestra ciudad, cuyo objetivo principal es modernizar unas instalaciones que se han quedado obsoletas y están absolutamente infrautilizadas", señala Cuesta sobre una reforma que, según afirma, permitirá ampliar el aforo del pabellón, interviniendo en la pista, y logrando que tenga un uso polivalente". Así, según adelanta el concejal, las nuevas instalaciones se diseñarán para otros deportes, además del baloncesto, y también para "posibles actividades puntuales de otra índole".

En estos momentos se está acelerando el proceso desde la concejalía de Infraestructuras para sacar los pliegos del proyecto "cuanto antes" y que se pueda licitar antes de que finalice este año. La obra se aprovechará para la mejora del aislamiento del edificio y también, según confirma Cuesta, se estudiará la posibilidad de dar usos comerciales a los bajos del inmueble.

"Con la reforma de este edificio singular se conseguirá un nuevo equipamiento deportivo polivalente, que permitirá, entre otras cosas, competir en la liga ACB al Oviedo Baloncesto, y revitalizar el barrio de Ventanielles", concluyó el edil.

A la espera de lo que determine el proyecto que Infraestructuras pretende dejar encaminado este mismo año, la intención inicial del Ayuntamiento pasa por evitar la ejecución de excavaciones para ampliar la capacidad del Palacio de los Deportes. Aunque en un principio sí que se barajó un recrecido de la grada con una importante bajada de la cota de la pista, el gobierno municipal confía en que la retirada de las pistas de atletismo, que serán trasladadas al recinto del fallido spa del Naranco, será suficiente para lograr el aforo necesario para que el Oviedo Baloncesto pueda optar a la ACB, máxima categoría nacional. Las obras y los estudios geológicos que se han realizado en la zona, incluida la construcción del propio Palacio de los Deportes, han confirmado la mala calidad del terreno en esa parte de la ciudad. A este respecto, cabe recordar que en 1998, justo cuando se iniciaba la excavación de un aparcamiento en el barrio de la Tenderina, aparecieron importantes grietas en viviendas de Ventanielles. Una manzana entera tuvo que ser precintada y más de 360 familias fueron desalojadas.

Ildefonso Sánchez del Río, arquitecto que dirigió la construcción del palacio, ya alertó de la mala calidad del terreno sobre el que se levantó tanto durante las obras como tras su inauguración, en 1975: "Terreno malo, compuesto de arcillas blandas. Fue preciso emplear pilotes moldeados por entubación inclinados a 25 grados" , dejó por escrito.

Según la normativa, si el Oviedo Baloncesto pretende seguir en la élite baloncestística nacional a partir de la temporada 2021- 2022 tendrá que disponer de un aforo mínimo de 2.500 plazas. El doble para llegar a la ACB. El pabellón de Pumarín en el que el club disputa ahora sus partidos y cuya ampliación se considera inviable por los técnicos municipales, dispone en la actualidad de 1.400 butacas. Las restricciones por el covid dejarán la capacidad real en muchas menos plazas.

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