"El sectarismo del bipartito tiene a Oviedo parado. El PP y Ciudadanos no son capaces de esgrimir argumentos que justifiquen la paralización del plan de recuperación del Campo San Francisco, una reforma integral, seria y que dignificaría un espacio público emblemático". Así valoró ayer la portavoz municipal de Somos, Ana Taboada, la decisión del gobierno de centroderecha de descartar el concurso de ideas para la reordenación del principal "pulmón verde" de la ciudad y su entorno, cuya propuesta ganadora apostaba por conectar el Campo a la plaza de España y a la Escandalera.

Para la portavoz de la marca local de Podemos, el PP y Ciudadanos no disponen de argumentos que vayan "más allá de ese sectarismo político". "Su plan de ciudad es no hacer nada, la parálisis permanente", añadió Taboada.

"El plan del Campo es un proyecto serio, fruto de un proceso de participación ciudadana coordinado en colaboración con el Colegio de Arquitectos. Un jurado profesional eligió un proyecto ganador y se niegan a convocarlo para emitir el fallo porque no quieren ejecutar el proyecto, simplemente porque emana de una etapa de gobierno anterior. Si no fuera por su necedad, a estas alturas el paseo de los Álamos ya estaría rehabilitado", detalló Taboada. "A ver cómo explican esto a los ovetenses", precisó la portavoz morada.

Como informó ayer este diario, la propuesta ganadora del concurso de ideas para la reordenación del Campo San Francisco y su entorno -convocado hace dos años y que Urbanismo descarta ahora- planteaba la conexión física del paseo de los Álamos y la plaza de la Escandalera, la restauración integral del mosaico de Antonio Suárez y nuevas peatonalizaciones parciales, entre ellas las de la calle Santa Susana y Uría. También incluía restricciones al tráfico rodado en las vías que rodean al parque y la eliminación de todos los aparcamientos en superficie del centro, así como la reconversión del parking subterráneo de la Escandalera en un centro intermodal de transportes. El presupuesto rondaba los dos millones de euros y el plazo de ejecución se fijó en veinte meses.

Al concurso de ideas convocado por Urbanismo, con el entonces concejal de Somos, Ignacio Fernández del Páramo al frente, concurrieron ocho ofertas. La decisión del jurado, integrado por arquitectos, ingenieros y funcionarios municipales no se llegó a hacer pública. Sin embargo, este diario ha sabido de fuentes conocedoras de todo el proceso que el plan mejor valorado por el tribunal fue el de unos arquitectos asturianos que proponían para este céntrico enclave de la ciudad un gran espacio peatonal desde la plaza de España hasta la Escandalera, con continuidad hacia el eje comercial ya libre de coches.