Casi cuatro años después de que echara el cierre, el pequeño bar del Parque de Invierno, un equipamiento de concesión municipal en la avenida de Pedro Masaveu, junto a la zona de juegos infantiles, está a punto de volver a abrir. Al menos esa es la promesa que hace el concejal Gerardo Antuña (PP) desde Parques y Jardines, área a la que pertenece el pequeño kiosco.
Pese a que el anterior equipo de gobierno anunció en más de una ocasión la reapertura del establecimiento, el concurso para buscarle nuevo explotador nunca llegó a buen término. Ahora Parques y Jardines ya ha elaborado un nuevo pliego que está en Contratación (concejalía también bajo la responsabilidad de Antuña) y desde donde el edil confía en que salga a la mayor brevedad posible el documento que permita lanzar la licitación.
En principio, detalla, se trataría de una concesión de dominio público por tres años prorrogables a otros dos, podría aprobarse en Junta de Gobierno a finales de este mes o principios de octubre y que saldrá con un canon inicial de unos 3.000 euros al año.
"Teniendo en cuenta los procesos administrativos", concluye Gerardo Antuña, "es probable que a finales de año este ya adjudicado y operativo". El equipamiento del Parque de Invierno estuvo parado mucho tiempo y el equipo de gobierno actual confía en poder dar una solución a la demanda de los vecinos, que llevan todo este tiempo reclamando la reapertura del pequeño kiosco de ladrillo.
El cierre del bar se produjo cuando el Ayuntamiento decidió no renovar el contrato con los anteriores adjudicatarios después de recibir numerosas quejas de usuarios, centradas en la baja calidad del servicio y en que el local no abría con una mínima regularidad. Dispuesto a readjudicar el bar cuanto antes, el tripartito llevó a cabo a principios de 2017 diferentes obras de mejora en el inmueble.
Aunque el anterior gobierno no logró ponerlo en marcha, los pliegos que llegaron a redactar incidían en los problemas que habían llevado a la retirada de la concesión, pretendiendo garantizar, así, que, contra lo que venía sucediendo con los anteriores adjudicatarios, el bar del Parque de Invierno permaneciera abierto el mayor tiempo posible durante la temporada de buen tiempo. La intención era obligar a los nuevos concesionarios a abrir un mínimo de 250 días al año. El contrato que se planteaba entonces era por dos años, con posibilidad de aplicar dos prórrogas, de doce meses cada una de ellas y el canon de partida para el concurso, como ahora, era de 3.000 euros al año.
Junto a la reapertura del bar del Parque de Invierno, Gerardo Antuña anda también detrás de la recuperación de otro equipamiento similar, el aguaducho del Campo San Francisco. En este caso, aclara, no es algo tan sencillo como lanzar una nueva concesión, sino que se trata de una mejora del equipamiento. Por ahora, el Ayuntamiento ya ha logrado luz verde del Principado para poder plantear una remodelación integral del bar situado en el centro del Campo, junto al estanque de los patos. Ahora, indica el concejal, es el momento de empezar a trabajar en el proyecto de reforma del aguaducho antes de iniciar el proceso de reforma y, posteriormente, la nueva adjudicación.
