"Me dijo que me iba a abrir en canal y tengo miedo porque sabe dónde vivo". La trabajadora sexual que denunció haber sido violada en casa de un ovetense el pasado 9 de diciembre de 2019 relató así ayer, con la voz entrecortada y visiblemente emocionada, las amenazas a la que el supuesto agresor, que permanece en prisión provisional, le sometió para agredirla sexualmente. El varón declaró que "fue todo consentido" e incluso acusó a la mujer de robarle en un primer encuentro mantenido el 16 de noviembre del mismo año. Por su parte, el fiscal decidió elevar de siete a diez la petición de años de cárcel para el procesado al considerar "creíble, lógica y coherente", la versión de la víctima.

El acusado fue el primero en declarar y se centró en negar una por una las acusaciones de la Fiscalía según las cuales agredió sexualmente a la prostituta en su casa tras contratar sus servicios a domicilio y negarse a pagarle los 120 euros por hora acordados por el servicio. "Te voy a follar como a mí me gusta porque eres puta y encima me vas a pagar", aseguró la mujer que le dijo el procesado mientras le abofeteaba y la forzaba a desnudarse y satisfacer sus deseos sexuales. El joven, por su parte, aseguró que la chica se ofreció a hacerle el servicio como forma de devolverle los 85 euros con los que, siempre según el procesado, esta se fue de su casa la primera vez que quedaron con la excusa de ir a por cerveza, pero no volvió. Si no la denuncié por la estafa de la primera vez fue por vergüenza ante mi familia", añadió.

Por la sala desfilaron hasta siete policías, los cuales coincidieron en subrayar que hallaron a la chica en el portal del inmueble portando únicamente una cazadora "muy nerviosa, alterada y llorosa" y que desde un principio relató haber sido víctima de una agresión sexual. Igualmente, declararon haber visto al detenido "muy nervioso y agresivo" esa misma noche. La mujer aseveró ante los jueces que salió con la cazadora al escapar tras un duro forcejeo, mientras que el investigado dijo haber sido él quien la echó de casa tras reclamarle dinero y amenazarle con enviar a "un chulo de la mafia brasileña" a pegarle si no le pagaba.

La acusación, a cargo del abogado Miguel Rama, reclama 14 años y ocho meses de cárcel para el procesado, mientras que su defensa, a cargo de la letrada María Fernández Casas, sostiene que se trata de una denuncia falsa y además de pedir la libre absolución para su cliente y solicitar el fin de la prisión provisional anuncia medidas legales contra la chica si finalmente el joven sale absuelto.