La magistrada del Juzgado de Instrucción número 3 de Oviedo decretó esta mañana el ingreso en prisión, comunicada y sin fianza, para el hombre que atracó el pasado viernes la oficina de la caja Rural ubicada en el número 209 de la calle Tenderina Baja, en la conocida como rotonda de Cerdeño. El delincuente, que tiene "entre 55 y 60 años", logró llevarse "entre dos mil y tres mil euros" utilizando una arma de fogeo. Antes de marcharse con el botín, el hombre se las arregló para dejar encerrados en el interior de la oficina a todos los empleados y también al resto de personas que estaban en ese momento en el interior.

La decisión de la juez se corresponde con la petición de prisión provisional de la Fiscalía, basada en la gravedad de los hechos y en la existencia de «riesgo de fuga". Por el momento, la jueza ha atribuido al hombre un delito de robo con violencia e intimidación, sin perjuicio de que esta calificación pueda modificarse a lo largo de la instrucción en curso.

Los hechos se produjeron alrededor de las dos y diez de la tarde. Fuentes conocedoras de lo ocurrido aseguran que el atracador actuó completamente vestido de negro y con zapatillas de deporte. "Llevaba incluso una especie de boina que también era de ese color", afirman esas fuentes. El delincuente también se marchó del banco con el teléfono móvil de unos clientes antes de dejar a todo el mundo encerrado en el interior de la oficina bancaria.

La detención se produjo una hora más tarde en las inmediaciones. Los agentes de uno de los zetas de la Policía Nacional estaban buscando una persona que se correspondiese con la descripción ofrecida por los testigos y la encontraron muy cerca de la rotonda de Cerdeño. Lo cogieron en un portal situado en la calle Manuel Sánchez Ocaña después de detectar una actitud sospechosa. "En cuanto lo vieron se entregó y reconoció los hechos", afirman las mismas fuentes.