Ciudades como Oviedo pueden ser competitivas en un mundo cada vez más globalizado, y las circunstancias de la crisis sanitaria pueden ser, más allá de un problema, una oportunidad para que núcleos urbanos de tamaño medio puedan captar talento joven e ideas empresariales pioneras. Esa es la principal conclusión de la primera sesión de "FuturOviedo", el nuevo espacio de reflexión sobre la ciudad organizado por LA NUEVA ESPAÑA y que esta tarde juntó en un encuentro telemático al abogado Bernardo Gutiérrez de la Roza, al empresario Javier Hidalgo y a la directiva de empresas tecnológicas Patricia Cartes.

Con optimismo, y con la invitación a "ser valientes", los tres expertos invitaron a los ovetenses a sacudirse de encima las inercias negativas, tratar de sacar el máximo partido a infraestructuras con tanto potencial como la fábrica de armas de La Vega, dar facilidades para que los nuevos modelos de empresas se instalen en la ciudad y para que los jóvenes emigrados puedan retornar y desarrollar aquí sus proyectos. Antes del coloquio, el alcalde, Alfredo Canteli, defendió la calidad de vida y los cimientos culturales como las mejores bazas para lograr posicionarse entre las ciudades más atractivas de su territorio.

Entre los ejemplos a seguir para Oviedo que se citaron, se escuchó hablar de Athlone, en Irlanda, por la forma en que ha sabido captar la atención del sector farmacéutico, o de Bilbao, por sus planes a largo plazo para fomentar los proyectos empresariales de mayor interés.

"Los carbayones", resumió Patricia Cartes al finalizar el encuentro antes de lanzar un guiño al Real Oviedo, "lo podemos lograr todo".