Canteli quiere recuperar La Vega para Oviedo mediante un plan de varias fases a través del cual las tres administraciones -Estado, Principado y Ayuntamiento- vayan llenando de actividad de manera progresiva los 120.000 metros cuadrados de los terrenos de la antigua factoría mediante proyectos consensuados e impulsados por distintas líneas de financiación. Son, a grandes rasgos, las claves con las que el regidor acudirá a una cita con la ministra de Defensa, la socialista Margarita Robles, todavía sin fechar, en la que el mandamás municipal se fija como objetivo acabar con el abandono del complejo industrial. "Voy a luchar a muerte por La Vega", aseguró Canteli ayer durante una visita a la exposición del Desarme en la plaza Trascorrales.
El Alcalde dijo estar ultimando la redacción de su "planteamiento" para los terrenos de La Vega, pero evitó de momento profundizar en detalles, más allá de volver a descartar una compra millonaria. "Las condiciones pactadas por el equipo de gobierno anterior eran inviables pues había que poner 44 millones y otros 50 encima para desarrollar aquello", dijo en referencia al protocolo firmado por su antecesor, el socialista Wenceslao López, con el ministerio, que el actual ejecutivo municipal ya dejó caducar para evitar su ejecución.
La alternativa pasa, según fuentes municipales, por una fórmula basada en la cesión y la cooperación entre administraciones. El Consistorio tiene claro que el futuro de La Vega "no va a ningún sitio" sin el apoyo de Defensa y también considera primordial la participación del Principado. Algo que también dejó entrever el Alcalde. "Espero que mi planteamiento confluya con el de Defensa", declaró en un claro llamamiento al trabajo codo a codo para empezar a dar usos cuanto antes a unas instalaciones cerradas en 2012 y que desde 2014 se han reabierto en varias ocasiones para acoger exitosas iniciativas culturales.
Desde el Ayuntamiento tienen en cuentan la gran acogida de los actos organizados tanto en las tres últimas ediciones de los Premios Princesa de Asturias como en las Noches Blancas y los festivales celebrados en los últimos veranos para proponer la posibilidad de habilitar un recinto multiusos aprovechando unos 30.000 metros cuadrados de la parcela. Esa sería la gran apuesta municipal, pero la intención de Canteli y los suyos y completar el complejo con edificios públicos, complejos industriales relacionados con sectores al alza e incluso desarrollos urbanísticos si fuera necesario. "En caso de haber algún tipo de retorno económico se repartiría entre las administraciones de manera proporcional a sus aportaciones con la recuperación de la fábrica", apuntan desde el seno del equipo de gobierno en referencia a uno de los aspectos que están barajando proponer al Estado.
En el Ayuntamiento son cautos y quieren conocer, antes de lanzar las campanas al vuelo sobre un posible proyecto de futuro para La Vega, si la administración central está por la labor de participar activamente en la recuperación del emblemático espacio industrial o, por contra, su interés es únicamente el de deshacerse de los terrenos.
Los futuros equipamientos, advierten, están todavía muy lejos, pues la dotación de nuevos usos de la fábrica supondrá un largo camino de trámites burocráticos similar al de los terrenos del viejo HUCA y por esta razón que abogan por una ejecución por fases capaz de iniciarse en un plazo más corto.
