Quiso obtener un cuantioso botín a costa del trabajo ajeno, y a cuenta de ello podría terminar en la cárcel. Un hombre se sienta hoy en el banquillo acusado de asaltar de madrugada una tienda de comestible de la plaza de San Miguel para llevarse 7.500 euros. El fiscal considera que los hechos constituyen un delito de robo con fuerza y al tratarse de una reincidencia pide una condena de cuatro años de cárcel, además de la devolución de todo lo sustraído.

Los hechos tuvieron lugar en la madrugada del 11 de junio de 2018. El hombre entró en el establecimiento tras romper la puerta de cristal del mismo. Una vez dentro, forzó la caja fuerte y sustrajo de su interior 7.300 euros, seguidamente se hizo con cien euros más que había en la caja registradora y también encontró otros cien euros que se encontraban en un neceser. A día de hoy, los propietarios no han recuperado ni un euro.

A lo robado hay que sumar los daños materiales ocasionados. Reparar la caja fuerte costó 74,95 euros y sustituir el cristal destrozado conllevó a los dueños hacer frente a una factura de 105,67 euros. El seguro solo se hizo cargo de 1.299,27 euros y ahora la Fiscalía reclama condenar al procesado, además de a cuatro años de cárcel, a pagar 6.381,35 euros a la víctima y reembolsar a la compañía aseguradora el dinero que en su día pagó al afectado.