La Semana del Audiovisual Contemporáneo de Oviedo (SACO) y la Cátedra Leonard Cohen se fusionaron ayer en el Filarmónica para rendir tributo a Luis Eduardo Aute. Ya se sabe que "todo en la vida es cine, y los sueños cine son". Lo materializó, o lo inmaterializó con su voz Mapi Quintana, y lo subrayó con su guitarra Carlos Pizarro.

Fueron solo seis canciones antes de la proyección del documental "Auterretrato", pero fue lo suficiente para desconfinar mentes y romper los perímetros emocionales de los asistentes. Quintana y Pizarro reinterpretaron a Aute en clave jazzística, pero en su viaje también decidieron saltarse esas fronteras y darse unas vueltas por la música brasileña o por el rock and roll más estereotipado.

"Pasaba por aquí", sirvió para abrir boca y dejar boquiabiertos a los asistentes. Fue la primera y Pizarro fue aquí guitarrista de jazz, de los que gustan de la improvisación y de dejarse llevar al tiempo que marcan los caminos que debe seguir la voz, en este caso la de Mapi Quintana, que también se revela y decide llevar la melodía a sus terrenos. Un miniconcierto también sirve para defender la cultura en tiempos de pandemia y agradecer la presencia del público porque "cuando estamos aquí echando agua a las plantas (la cultura), es todo muy emocionante", dijo ante el público que se resintió ante las últimas medidas de las autoridades. Las entradas estaban agotadas, pero fueron muchos los que no ocuparon sus butacas.

"Rosas en el mar" sirvió para dejar paso a "La belleza". "Pobres de nosotros si pasamos por la vida y no encontramos la belleza", presentó Quintana. La fuerza de la guitarra de Pizarro puso los signos de exclamación a la voz de Mapi y a la letra de Luis Eduardo.

El rock and roll de plaza de pueblo llegó con "Anda suelto Satanás". "Teníamos que romper el hechizo de la belleza con algo satánico".

Y entonces llegó la magia en el sentido más amplio de la palabra. Llegó ese momento que ocurre alguna vez en los conciertos en el que el público se queda anclado a la butaca y apenas se acuerda de que tiene que respirar. Ese momento en el que el vello se eriza y es lo único que te recuerda que estás en un espacio y tiempo determinado. Llegó "Al alba". Mapi Quintana confesó que cuando hace unos años se empezó a interesar por la historia de su familia durante la Guerra Civil, la canción de Aute apareció en su vida. "Tú y yo tendremos que subirnos juntas algún día a un escenario y hablar de esto", le dijo la cantante a la composición de Aute. Ese momento llegó ayer y quedó para la eternidad.

Y para cerrar, claro, "Cine, cine", que esto se trata de una semana del audiovisual contemporáneo y en realidad "los sueños, cine son".