Los tres talleres de empleo y las dos escuelas taller desarrollados en Oviedo en los últimos meses han servido para formar a 152 jóvenes del concejo en situación de desempleo. Para poder desarrollar este tipo de programas –que dieron comienzo en mayo de 2019 y finalizaron el pasado día 30 de octubre– ha sido necesaria una inversión total de 3.656.942 euros, de los que 1.031.178 han salido de las arcas del Ayuntamiento. El Servicio Público de Empleo del Principado de Asturias (Sepepa) ha puesto el resto del dinero.
Los proyectos de las escuelas taller constan de una primera etapa de carácter formativo de iniciación y de una segunda de formación en alternancia con el trabajo y la práctica profesional. Las obras que se desarrollen en las escuelas taller deberán posibilitar a las personas participantes –jóvenes desempleados menores de 25 años– la realización de un trabajo efectivo que favorezca su inserción laboral. Cada uno de los alumnos de las dos escuelas taller que se han desarrollado recientemente en Oviedo recibió una formación teórico-práctica de 2.700 horas. Los primeros seis meses se dedicaron a dicha formación y al año siguiente los jóvenes fueron contratados por el Ayuntamiento en la modalidad de contrato para la formación y el aprendizaje. La formación se impartió en el complejo de formación de La Corredoria, en el centro situado en la calle Daniel Moyano y en las instalaciones del parque de Purificación Tomas.
En las escuelas taller “se realizaron obras y servicios variados, que han redundado en un beneficio para todos los ovetenses, así como para los asturianos y demás visitantes de nuestra ciudad”, sostienen fuentes municipales. Los alumnos de una de esas escuelas taller –en total, 13 hombres y 8 mujeres– fueron los encargados de la recuperación del entorno de los meandros del Nora. A lo largo de varios meses, estos jóvenes limpiaron 14 kilómetros de sendas, instalaron señales y paneles informativos en la zona y diseñaron talleres ambientales para escolares, entre otras cosas.
La otra escuela taller tuvo que ver con el Camino de Santiago a su paso por el municipio. Los alumnos del proyecto “Inicio del Camino” –16 mujeres y 16 hombres– realizaron labores tales como diseñar folletos explicativos sobre la Catedral y sobre la ruta jacobea a su paso por el municipio, editar vídeos promocionales adaptados con lenguaje de signos o encargarse de atender a los peregrino en el albergue municipal del Salvador.
Los talleres de empleo, por su parte, se configuran como un programa mixto de empleo y formación de carácter temporal que tiene por objeto mejorar la empleabilidad de las personas paradas de 25 o más años y con especiales dificultades de inserción laboral. En el taller de empleo de ecoeficiencia participaron un total de alumnos. Un equipo se encargó de ejecutar diferentes obras y labores de mejora en el propio Centro de Formación de La Corredoria y en el Palacio de los Deportes de la ciudad, donde se llevaron a cabo trabajos de electricidad y fontanería.
Otro de los talleres de empleo se centró especialmente en el edificio de La Corredoria que está destinado a albergar un mercado y que aún no ha abierto sus puertas al público a pesar de llevar años terminado. En ese taller, bautizado como “Mercado y más Corredoria”, participaron 18 hombres y 15 mujeres que llevaron a cabo diferentes operaciones de revestimiento, limpieza de superficies y mobiliario en edificios y locales o trabajos de carpintería en el futuro mercado y en otros espacios del populoso barrio.
El tercero de los talleres de empleo, el de “Urbanismo táctico”, contó con la participación de 4 hombres y 12 mujeres, distribuidos en dos módulos. Se encargaron de colaborar con el Ayuntamiento en campañas como las de Navidad y citas como Carnaval o la denominada “Gran Kermés”.
