“Recuperar la alegría y una cierta sensación de normalidad”. Con esa idea en la cabeza, y a pesar de que las limitaciones por la pandemia todavía estarán afectando a la hostelería y a las programaciones culturales, el concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Nacho Cuesta, pasó ayer revista al despliegue de iluminación navideño con cuyo encendido, previsto para este viernes, quedará inaugurada la temporada festiva. No será la única instalación. Ese día también inaugura Festejos el belén de la plaza de la Catedral, organizado por la agrupación “Como yera antes” de Valdesoto, donde también allí se han incluido novedades para hacer crecer la instalación, y el Mercadillo de Navidad abrirá sus puertas.
Si las luces son prácticamente el doble que las que había el año pasado, habiéndose doblado también el tamaño del pasillo de luz de la calle Pelayo o con la instalación de un gran árbol en la plaza de la Escandalera, en el belén de la Catedral se ha instalado por primera vez un molino que moverá agua, para dar mayor dinamismo a la instalación.
La concejala de Festejos, Covadonga Díaz confía en poder abrir cuanto antes la exposición de belenes de Trascorrales y que el programa pensado para los más pequeños, a partir del 23 de diciembre, no se vea afectado por las restricciones debidas a la pandemia. Por ahora no hay fechas confirmadas porque el Ayuntamiento tiene que esperar a que quede sin efecto el decreto del gobierno regional que impide tales actividades, pero ya está prevista, sobre el papel, la recepción a los Reyes en el Calatrava para el 5 de enero y una serie de programaciones también en el Palacio de Congresos y en el Auditorio, con musicales y conciertos. Díaz es prudente a la hora de anunciar actividades, pero ya cita, en la cartera de espectáculos previstos, el concierto del grupo “Pica-pica” o el musical de “La Dama y el vagabundo”. Cultura también quiere desarrollar otro tanto de actividades y el concejal José Luis Costillas también destaca, con la prudenica debida a la espera de que se levanten las prohibiciones, actuaciones de coros en la calle, conciertos de la Banda de música Ciudad de Oviedo y de la Real Banda de Gaitas, el programa de “música en los balcones” o un concierto especial de Navidad de Cristina Gestido.
Para completar el cartel de actividades, fuera del programa navideño pero coincidente en el tiempo, la concejala de Festejos también confía en poder desarrollar el concurso de rock “Alejandro Espina” en la fábrica de armas de La Vega, con grupos invitados, los fines de semana del 11 y del 18 de diciembre.
Propuesta gijonesa
Para acabar de redondear la propuesta, ayer quedó en el aire una nueva posibilidad. Desde Gijón, Divertia lanzó la idea de ir de la mano de Oviedo y Avilés para pedir al Principado que les permita organizar un modelo de cabalgata seguro. La idea de Gijón es invertir el recorrido habitual, en el que los niños salen a ver a los Reyes, y que sean los Reyes los que vayan a ver a los niños. Se plantea, así, que no haya aglomeraciones en las calles y que la gente lo pueda seguir desde las ventanas, con un recorrido más extenso, pasando por toda la ciudad.
Son las dificultades de los tiempos covid. Como decía ayer Nacho Cuesta, por una parte todo el esfuerzo en luces y actividades persigue que venga gente a Oviedo y que compren en el comercio local, como sucedió el año pasado, pero, por otro, que todo ello no traiga aglomeraciones.