Todos aquellos que conocían a Ángel Torres García coinciden a la hora de señalar que era un hombre “bueno y honesto”. Muchos de esos amigos acudieron ayer al tanatorio de Los Arenales para acompañar la familia del exconcejal del Ayuntamiento de Oviedo, que falleció el pasado domingo a los 64 años de edad. “Es un momento muy triste porque era una persona muy joven. Lo conocí sobre todo durante su época en el Ayuntamiento, pero también conozco a sus hermanos y a otros miembros de su familia. Son gente buena y que lleva Oviedo muy adentro”, asegura el Alcalde del municipio, el popular Alfredo Canteli, que estuvo en Los Arenales junto a dos ediles de su partido, Mario Arias y José Ramón Prado. Ángel Torres García fue concejal en Oviedo entre los años 1995 y 2003 –con Gabino de Lorenzo como Alcalde– y siempre estuvo vinculado a las áreas de Comercio y Deportes.

“Creo que fue una persona honesta, una persona trabajadora que deja un buen recuerdo. Insisto, lo que más recuerdo de él es que siempre tenía la palabra Oviedo en la boca”, destaca Alfredo Canteli del fallecido. “La familia está destrozada porque están muy unidos y se les ha ido una pieza muy importante. Un fallecimiento siempre es un momento triste, pero lo es más cuando el núcleo familiar es una piña”, añade el Alcalde.

Además de su amado Real Oviedo, entre las pasiones de Ángel Torres García siempre estuvo el fútbol modesto, al que estuvo vinculado durante mucho tiempo y por el que luchó a brazo partido. De hecho ocupó algún cargo en la Federación Asturiana de Fútbol antes de que lo fichase Gabino de Lorenzo. En el Ayuntamiento de Oviedo empezó de segundo del concejal Enrique Díaz y durante ocho años fue edil en el equipo de gobierno municipal con diversas responsabilidades. No en vano, comenzó en el área de Deportes, pasó por Zona Rural, Alumbrado y Servicios Generales y asumió cargos ligados a Consumo, Sanidad y Mercados. También se convirtió en el primer responsable de Comercio en el Consistorio, una figura que antes no existía y que Ángel Torres desempeñó con éxito. Entre otras cosas, fue el concejal que consiguió poner en marcha la marca Oviedo Tiendas.

“Nosotros lo teníamos todo preparado para lanzarlo, pero él fue quien nos puso todas las facilidades y el que medió con Gabino de Lorenzo para impulsar la idea. Fue un buen concejal, una persona que trabajaba y que siempre estaba disponible cuando se le necesitaba, algo que no abunda”, señala Severino Álvarez Zaragoza, amigo personal del fallecido y en su día presidente de la Federación Asturiana de Comercio (FAC). “Era un hombre muy abierto y muy buena persona. Puede sonar a tópico en esta circunstancia, pero es cierto. Tenía amigos en todos los sitios y mucha gente lo apreciaba de verdad”, subraya Álvarez Zaragoza.

Ángel Torres trabajó como empleado de la Caja Rural y deja esposa y tres hijos. “Era muy buena persona e hizo todo el bien que pudo a mucha gente. Era muy guerrero, un poco cabezón, pero era muy bueno muy bueno”, asegura su hija María Torres. “Le gustaba mucho el deporte, sobre todo el fútbol y su Real Oviedo, con el que iba a muerte. A nosotros siempre nos inculcó el deporte desde que éramos pequeños como una forma de vida y de educación. Estoy muy orgullosa de todo lo que hizo por mí y por todos mis hermanos. Fue un gran padre y eso es con lo que nos quedamos”, añade.

El funeral por el eterno descanso de Ángel Torres García se celebrará hoy a la una de la tarde en la iglesia Parroquial de San Francisco Javier, en el barrio de La Tenderina.