La revisión del Plan General de Ordenación (PGO) que ha puesto en marcha el concejal de Urbanismo, Nacho Cuesta, incluye los terrenos del viejo hospital del Cristo, el recinto de La Vega y la Fábrica de Gas como grandes áreas de oportunidad para el desarrollo urbano y económico de la ciudad, dotándolas de una perspectiva claramente metropolitana por su estratégica situación y grandes dimensiones. Las tres parcelas, todas ellas sin uso y prácticamente abandonadas desde hace años, forman parte del paquete de proyectos que han seleccionado los redactores del planeamiento como claves para afianzar la capitalidad de Oviedo durante la próxima década. En la relación aparecen también el Prerrománico y el casco antiguo; el Camino Primitivo de Santiago; el Camino Real; el Naranco; la Universidad; el bulevar de Santullano; la Ronda Norte y el anillo central de la ciudad.
Según fuentes municipales, el interés de los redactores del plan –Víctor García Oviedo, Ramón Fernández Rañada y Emilio Rico– y también del área de Urbanismo por incorporar estos proyectos al nuevo PGO ha sido una de las causas, junto a la pandemia, de que el documento de prioridades que acaba de llegar al Ayuntamiento haya tardado más de lo previsto. Una vez recibido, la intención de Urbanismo es agilizar los trámites para que la aprobación inicial del nuevo planeamiento se produzca antes de que concluya este año, teniendo siempre en cuenta que se pretende contar con el máximo nivel de consenso por parte de los propietarios de suelo. Además, dentro de lo que permita la complicada situación sanitaria, el Ayuntamiento va a organizar en los próximos meses foros de debate, encuestas y entrevistas con los técnicos del área a fin de lograr la máxima participación ciudadana.
A partir de la aprobación inicial del plan, se abrirá un periodo de información pública del proyecto durante un mes y se dará audiencia a las administraciones afectadas durante otro mes. Llegará entonces el momento de proceder a una aprobación provisional por el Pleno municipal, que sería el paso previo al visto bueno definitivo por parte de la administración autonómica.
Tal y como adelantó ayer LA NUEVA ESPAÑA, el nuevo documento de prioridades que ha elaborado el equipo redactor plantea un modelo de desarrollo en el que se limita la construcción de viviendas unifamiliares en favor de las edificaciones bajas, de dos o tres alturas. Se trata de un modelo que se implantará, por ejemplo, en la entrada sur a la ciudad por Montecerrao o en el núcleo de Monte Canales. De acuerdo con el plan que va a a sustituir al aprobado el 2006, desfasado en numerospos aspectos, el crecimiento de la ciudad para los próximos años se centrará en barrios como las Campas y La Florida, así como en puntos de Ferreros, Ciudad Naranco o la parte de atrás del HUCA. Además, durante los últimos meses se están retomando varios proyectos residenciales que habían quedado aparcados por la crisis y que podrían salir adelante. Es el caso, por ejemplo, de las torres diseñadas por Patxi Mangado para el barrio de San Lázaro, del ámbito de Vaqueros-La Estrecha o del área de Montecanales.
Si se compara el documento de prioridades que impulsa ahora el gobierno municipal con el que presentó el tripartito de izquierdas durante el anterior mandato, una de las principales diferencias estriba en que se modera de manera importante la “descalificación” de suelos urbanizables en las afueras de la ciudad. Ese proceso se planteaba para un buen número de parcelas de áreas como La Monxina, Llames, Colloto o La Manjoya.
Otra de las características destacadas del nuevo PGO es que reduce de manera significativa la edificabilidad prevista en el que está en vigor y que fue aprobado en plena “burbuja” inmobiliaria. En concreto, el planeamiento de 2006 reservaba suelo para levantar un total de 36.141 viviendas en la ciudad y la intención inicial de los arquitectos que se encargan de la revisión del documento pasaba por dejar la cifra en 28.478, con 2.515 chalés y 25.963 pisos.
Según el texto refundido de la ley del Suelo de 2015, resulta obligatoria destinar una reserva del 30 por ciento en las nuevas promociones a desarrollar en suelo urbanizable. En aquellos suelos urbanos que vayan a ser sometidos a renovación sería del 10 por ciento. En principio, se trata de los porcentajes que se van a aplicar en el municipio de Oviedo durante la próxima década, según confirman fuentes municipales.
Cuesta: “Quiero un urbanismo sostenible”
“El proyecto de ciudad que quiero para Oviedo se basa en un urbanismo sostenible, que priorice la edificación en baja altura y con la integración de espacios naturales en los propios proyectos de urbanización”. Así resumió ayer el concejal de Urbanismo, Nacho Cuesta, el espíritu de la revisión del Plan General de Ordenación (PGO) que entra ahora en su fase decisiva tras la presentación del documento de prioridades por parte de equipo redactor. Por su lado, el concejal de Somos Ignacio Fernández del Páramo aseguró ayer que la nueva revisión del PGO que impulsa Cuesta obedece a “lobbies empresariales que defienden él y su partido”. A este respecto, el edil recordó que durante el anterior mandato, cuando era el máximo responsable de Urbanismo, ya se presentó un documento de prioridades. Sin embargo, advirtió de que “lo primero que hizo Ciudadanos nada más llegar al gobierno fue revisar ese documento y encargar una nueva redacción”. “El nuestro no les valía porque les paraba los pies a los especuladores y a los yonkis del hormigón”, subrayó.
