Más de cuatrocientas fotografías que recogen la historia de Trubia de los últimos 135 años, de sus gentes y de todo lo que tiene que ver con una localidad que le vio nacer a él y a muchas generaciones de su familia. Ese es el contenido de “Trubia desde la nostalgia”, el último libro de Valentín Álvarez, un operario del taller de blindados de la Fábrica de Armas que se define como “un cascarillero de toda la vida –apelativo con el que popularmente se conoce a los trubiecos– y un enamorado de la historia del pueblo”. Este es el tercer trabajo de Álvarez, que previamente ya había publicado “recuerdos de Trubia” y “Real Juvencia. Historia del fútbol en Trubia”.
El libro se divide en cinco apartados de temática diferente: vistas y calles, industrias, música y fiestas, deportes y sociedad. “En este último bloque hay de todo, desde guajes en la escuela hasta fiestas y recuerdos familiares míos y de otros trubiecos”, explica el autor. Muchas de las instantáneas pertenecen a la colección de fotógrafos históricos de Trubia, como Arsenio Álvarez o Antonio Vela.
“También hay algunas de Chico, Quilo y Rafa. Quiero dejar muy claro que este libro, en parte, es un homenaje a todas estas personas que con su trabajo nos han permitido mantener viva la historia del pueblo”, dice Valentín Álvarez, que también agradece el apoyo de las tres grandes de empresas de Trubia. En el libro hay fotografías de personas como Jules David, un francés contratado a finales del XIX por las Fábrica de Armas para promocionarse.
