La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Desbloqueada la reforma del Palacio de los Deportes de Oviedo, que prevé estar listo en 2023

Infraestructuras ya tiene listos los pliegos para contratar un proyecto que debe incluir más aforo, reforma energética y bajos comerciales

El Palacio de los Deportes de Oviedo. | Luisma Murias

El Ayuntamiento quiere convertir el Palacio de los Deportes en un edificio moderno, energéticamente sostenible, en el que 5.000 espectadores puedan acudir a competiciones deportivas de primer nivel o a grandes espectáculos. También se transformarán sus bajos en locales hosteleros y comerciales que contribuyan a dinamizar el barrio de Ventanielles. Y todo eso sucederá antes de que acabe 2023, según las estimaciones que se manejan en el Ayuntamiento.

De momento, los técnicos de Infraestructuras finalizaron ayer los pliegos del concurso para redactar el proyecto de reforma. La concejalía dirigida por Nacho Cuesta (Cs) quiere contratarlo lo antes posible, por un importe inicial de 190.000 euros. Las obras, cofinanciadas con medio millón de los fondos EDUSI, llevan pendientes desde 2017, cuando se anunciaron al aprobarse la ayuda comunitaria. La redacción del proyecto parece que pondrá en marcha el arreglo del equipamiento y así lo celebró el propio Cuesta, asegurando que se pasa “de las palabras a los hechos”.

Los redactores que se hagan con la licitación para diseñar la reforma del Palacio tendrán seis meses para dar forma a su propuesta. Mientras, está previsto que se reubiquen las pistas de atletismo, ahora dentro del pabellón, en un nuevo equipamiento en el fallido spa del Naranco. El pasado viernes, la propia concejalía de Infraestructuras contrató una asistencia técnica para dibujar las futuras pistas de Ciudad Naranco y el área de Contratación adjudicará, previsiblemente, el derribo de las estructuras existentes el próximo lunes 22 de febrero. Cuando finalice ese traslado, y el proyecto esté redactado, podrán comenzar los trabajos en el Palacio de los Deportes.

La reforma, según los pliegos del concurso para redactar el proyecto, mejorará la eficiencia energética del equipamiento, resolviendo las deficiencias estructurales de un inmueble construido en la década de los sesenta. Se actuará sobre la cubierta y se renovará todo el sistema de calefacción. La parte de eficiencia energética corre a cuenta de la subvención europea, con una reducción de más del 50% en las emisiones y del 30% en el consumo. El resto de las actuaciones en el Palacio estarán financiadas por fondos municipales, que rondarán los dos millones y medio de euros. Los trabajos exigidos pasarán por la mejora de la accesibilidad del inmueble, adecuándolo a la normativa vigente y a las futuras necesidades del recinto. El Palacio debería ganar aforo con las obras hasta llegar a los 5.000 asientos, y todo ello, sin alterar su estructura. Con estas limitaciones, y según fuentes conocedoras de la operación, para conseguir esa capacidad la reforma debería incluir “una excavación de unos dos metros”. En el exterior, la idea de Nacho Cuesta es crear un espacio comercial y hostelero que respete, en todo caso, la catalogación del Palacio como edificio singular.

En la licitación que sacará el Ayuntamiento en los próximos días, la propuesta que se haga sobre el aforo (siempre con el objetivo de llegar a los 5.000 asientos) tendrá mucho peso en el baremo. Es la cifra que necesitaría el Oviedo Club Baloncesto (OCB) en caso de llegar a ascender a la máxima categoría. El club, que actualmente juega en el polideportivo de Pumarín, sería el inquilino natural del Palacio y así se lo han prometido repetidamente desde el Consistorio. La última vez, ayer. Al ser preguntado por este diario el teniente de Alcalde anunció que el renovado equipamiento dará respuesta “a varias necesidades imperiosas de la ciudad, como la que tiene el Oviedo Baloncesto”. El equipo, siempre amenazado por la Federación Española para cambiar de estadio podría respirar aliviado si las obras empezasen antes de que comience la siguiente temporada. Si entonces se le presentan avances significativos a la Federación esta sería, según fuentes cercanas a la misma, “comprensiva con la situación del club”.

Se trata, según el edil, de un proyecto que reportará tres beneficios a la ciudad, además del de salvaguardar los fondos EDUSI. La reforma, al decir de Cuesta, “será un ejemplo energético en un edificio singular de hace más de medio siglo, dotará a la ciudad de un pabellón con aforo suficiente para albergar competiciones de alto nivel y contribuirá a la dinamización económica de un barrio que lo necesita, como es Ventanielles”.

Lo más problemático de las futuras obras, además de los vistos buenos que deberá dar Patrimonio, serían las posibles excavaciones. Ildefonso Sánchez del Río, el ingeniero que dirigió la construcción del pabellón, ya alertó de la mala calidad del terreno, tanto durante las obras como tras su inauguración, en 1975: “Terreno malo, compuesto de arcillas blandas”, dejó por escrito. Las obras y los estudios geológicos han confirmado la mala calidad del terreno en esa parte de la ciudad. A este respecto, cabe recordar que, en 1998, justo cuando se iniciaba la excavación de un aparcamiento en el barrio de la Tenderina, aparecieron importantes grietas en viviendas de Ventanielles. Una manzana entera tuvo que ser precintada y más de 360 familias fueron desalojadas.

Compartir el artículo

stats