Los vecinos de Otero, Villafría, San Lázaro y Santo Domingo mostraron ayer su ilusión ante la perspectiva de que la brecha abierta por la Ronda Sur en esa parte de la ciudad pase pronto a la historia. Los residentes celebran la apuesta del equipo de gobierno municipal de habilitar un enlace peatonal de Otero a Santo Domingo y confían en que los espacios públicos habilitados con las obras permitan ampliar las zonas verdes y construir nuevos parques infantiles.
Acabar con la brecha abierta en la ciudad con la construcción de la nueva circunvalación hace cuarenta años es una reivindicación histórica y la apuesta del Ayuntamiento por darle una solución ilusiona a los residentes, hartos de perder minutos cuando tienen que dar rodeos para ir al centro de la ciudad. “Los barrios están incomunicados y ya es hora de hacer algo para acabar con ese problema”, sostiene Santiago Aguirre sin entrar en el debate de cuál sería la mejor solución para acabar con el aislamiento provocado por la ronda. “Me da igual si es un acceso peatonal o pasos de peatones, pero es algo necesario”, indica este vecino de Otero.
Estela Pascasio, también residente en Otero, va más allá y reclama orientar el proyecto municipal al acondicionamiento de espacios públicos de esparcimiento. “Todo lo que sea mejorar acceso para el peatón será bienvenido, al igual que las obras para hacer parques infantiles”, defiende Pascasio con ciertas reticencias a que la actuación esconda algún interés urbanístico. “Con los políticos nunca se sabe”, advierte.
Desde Villafría también coinciden en aplaudir la iniciativa municipal, aunque con algunos matices. Arancha Rodríguez representa el ala más escéptica. Admite la existencia de las quejas de vecinos cansados de tener que dar rodeos para ir a Santo Domingo, más duda de si el acceso peatonal proyectado por la concejalía de Infraestructuras debería ser la prioridad de la ciudad en estos momentos. “Está bien que hagan mejoras, pero veo más clamor por la necesidad de un parque de perros”, explica.
Juan Carlos Suárez considera positiva cualquier actuación para favorecer la movilidad y seguridad de los peatones, pero ve más acertada la reforma integral de Infraestructuras que la solución inmediata de habilitar un paso de peatones. “Tener que cruzar entre los coches podría propiciar más atropellos”, argumenta, dando por hecho que los conductores tardarían en adaptarse a la nueva señalización. “A algunos les gusta mucho pisar el acelerador”, subraya.
Si bien la bendición al proyecto consistente en la apertura de nuevas salidas a las calles Isidoro Chamorro y Asensio Bretones es generalizada, para los habitantes de los barrios “partidos” por la Ronda Sur deja abiertos algunos interrogantes. Es el caso por ejemplo del pasadizo estrecho que los vecinos de Villafría y Otero utilizan para ir hasta el puente de la calle Melchor García San Pedro. “Lo que propone el Ayuntamiento es muy bueno, pero tienen que conservar el pasadizo, porque es el camino más corto hasta la farmacia”, propone la vecina de San Lázaro Margarita García, que se dice “un poco cansada” de tener que perder “cuatro o cinco minutos” para ir al Fontán por no tener un acceso más directo desde su barrio hasta el casco histórico.
Pasadizo
Otros reconocen la utilidad del actual pasadizo para atajar en determinados trayectos, pero consideran más beneficiosa la solución del Ayuntamiento tanto para atajar como para mejorar la seguridad de los viandantes. “Es un acceso que apenas te evita el rodeo y cuando vienes por las noches hasta pasas miedo porque está muy oscuro”, subraya Carlota Sante.
Por último, están los que consideran que la solución llegará demasiado tarde. “Tengo una peluquería, pero la cerraré tras diez años porque entre la crisis y que los accesos para venir hasta aquí son muy malos no me queda otra que bajar la persiana”, apunta César Robledo, echando parte de la culpa del fracaso de su negocio al aislamiento al que la Ronda Sur somete a la zona de Villafría.
Canteli garantiza que en verano ya habrá paso de cebra y semáforo
¿Reforma integral del segundo tramo de la Ronda Sur o solución instantánea para que los vecinos de la calle Isidoro Chamorro puedan cruzar a Santo Domingo sin dar un rodeo? Lo que parece una disyuntiva entre dos soluciones distintas a un mismo problema es, en realidad, una sucesión de actuaciones que no son incompatibles pero tampoco tienen la misma urgencia. Eso dijeron ayer, con otras palabras y en distintos momentos de la jornada, el Alcalde, Alfredo Canteli, y el concejal de Infraestructuras, Nacho Cuesta. El responsable del proyecto de reforma integral adelantado ayer por LA NUEVA ESPAÑA salió pronto al paso del supuesto enfrentamiento que la reforma supondría ante la solución de Canteli. “No es incompatible que se haga el paso de cebra y se aborde la segunda fase de la reforma de la Ronda Sur, a la que seguirá una tercera fase”, matizó.
Canteli lo dijo más claro, su compromiso con los vecinos y lo que sucederá de forma inmediata es que “para el verano estará lista una rampa de bajada, un paso de cebra y un semáforo”. “Lo prioritario y lo urgente”, insistió Canteli, “es que los vecinos no tengan que andar 700 metros para cruzar la Ronda Sur”.
Sobre la segunda fase de reforma de la Ronda Sur, que presenta otra solución para los vecinos de Isidoro Chamorro, consistente en un paso peatonal paralelo que sube hasta el puente de Melchor García Sampedro, y que también incluye otras soluciones para la salida a la calle Asensio Bretones, además de la urbanización del entorno y de la mediana, Canteli matizó que la reforma también se llevará a cabo. “Pero no es ni prioritaria ni urgente”. El Alcalde no descarta, pues, seguir con las fases de la Ronda Sur pero “a largo plazo”.
Desde la oposición, Somos y Vox no perdieron oportunidad de sacar rédito a la aparente discrepancia entre Canteli y su socio, Nacho Cuesta. Desde Somos, Nacho del Páramo consideró el proyecto de infraestructuras “un volantazo” con “el fin de boicotear la propuesta de Canteli”, que ellos defienden y juzgan “mucho más sencilla y barata”. Cristina Coto sí apoyó la idea de seguir urbanizando la Ronda, pero consideró excesivo el presupuesto de 2,2 millones. “No a costa de proyectos faraónicos que no conducen a nada. falta información seria y veraz”, concluyó.
