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Comienzan a reparar en Latores la avería que impidió abrir los depósitos del Cristo

Los trabajadores de Aqualia, concesionaria del servicio, confían en finalizar la obra en diez días y conectar los tanques del Campón en marzo

Operarios de Aqualia reparan la fuga en Latores. | LNE

La conexión de los “nuevos” depósitos del Campón, postergada desde hace ya 17 años, sumó ayer un nuevo trámite. A principios del mes de enero una fuga en una tubería de Latores obligó a paralizar su puesta en funcionamiento, que ya cuenta con todos los permisos de Sanidad. Ayer, operarios de Aqualia, la empresa concesionaria del servicio de aguas, comenzaron la que se espera que sea “la actuación definitiva” antes de dejar sin funcionamiento los viejos depósitos de Los Quintos. Desde la concejalía de Infraestructuras confían en que no haya nuevas averías en la red de abastecimiento y se pueda poner fin a los problemas causados por la traída de aguas a la ciudad.

Las actuaciones para que el agua fluya desde el Campón no han sido pocas ni sencillas. Se trata de un culebrón que arrancó en el año 2001, cuando dieron comienzo las obras. Tres años después, en febrero de 2004, quedaban oficialmente inaugurados tras una inversión de nueve millones de euros. Por raro que resulte, la nueva infraestructura, con capacidad para 75 millones de litros de agua frente a los 50 millones de litros de los viejos depósitos azules de Los Quintos, no estaban conectados ni con la red local ni con la planta depuradora.

Una vez subsanado el “error” de conexión, se fueron acometiendo sucesivas reparaciones y, el pasado año, comenzaron las pruebas en la nueva tubería para certificar que ya no hay fugas y que todo está correctamente conectado. Mientras se realizaban las comprobaciones, hubo que trasladar el sistema de cloración de los viejos a los que se siguen llamando “nuevos depósitos”, pese a casi alcanzar las dos décadas de edad. Una vez se solucione la fuga de la tubería en Latores solo quedaría volver a “cambiar la llave”.

Fuentes del servicio municipal de agua indicaron, no obstante, que cuando se terminen de vaciar los depósitos de los Quintos se podrá apreciar lo dañado de la estructura de ese equipamiento, en el que, aseguran, el riesgo de grietas y daños en el hormigón era muy alto, por lo que realizar el traslado a los depósitos construidos en 2004 era algo “muy necesario”.

La fuga de Latores, que ocasionó un profundo socavón en una finca privada, se estima que se podrá reparar en unos diez días, es decir, los nuevos depósitos podrán volver a conectarse a principios del mes de marzo. Una vez se vacíen los viejos, muy cercanos al campus del Cristo, se abriría la puerta para cumplir una aspiración del nuevo rector de la Universidad, Ignacio Villaverde, que ya ha planteado la voluntad de la institución académica de hacerse con esos 30.000 metros de terreno, que el Ayuntamiento estaría dispuesto a cederle. Allí, en el espacio en el que se levantan los depósitos azules, la Universidad podría reubicar facultades que ahora tiene dispersas en otros puntos de la ciudad. En concreto, la pretensión de la Universidad es trasladar al Cristo las facultades de Minas (actualmente en la calle Independencia), la de Psicología (plaza de Feijoo) y las de Ciencias, Geología y Ciencias de la Educación I y II.

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