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Tragedia en el centro de Oviedo: un conductor de 70 años muere tras chocar con otro vehículo al sentirse indispuesto

La mujer del fallecido, al que los sanitarios no consiguieron reanimar, tuvo que ser excarcelada y trasladada al HUCA junto a otros dos heridos leves

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Accidente mortal en la calle Jovellanos, en Oviedo LNE

Un inoportuno problema de salud dejó al mediodía de ayer un muerto y tres heridos en la céntrica calle Jovellanos. Un conductor de 70 años sufrió una indisposición cuando circulaba junto a su mujer y una tercera persona a la altura del hotel España. El varón perdió el control del vehículo, impactando contra otro turismo y dos farolas, dejando la parte delantera del lateral derecho de su BMW totalmente destrozada. Los sanitarios no pudieron hacer nada por reanimar al piloto, mientras que los bomberos tuvieron que excarcelar a su mujer, de 65 años, que fue trasladada al HUCA con varios golpes. La acompañante de ambos, prima de la mujer, precisó atención médica tras sufrir heridas leves, al igual que el conductor del otro vehículo implicado.

Todo ocurrió en un abrir y cerrar de ojos en torno a las dos y media de la tarde. Según fuentes cercanas a la investigación, las acompañantes contaron que el conductor, M. K. K., de origen paquistaní, las había recogido previamente en la calle del Rosal. El hombre dijo encontrarse mal y decidió emprender la marcha hacia el hospital para ser examinado en Urgencias. Sin embargo, su estado se agravó en pleno trayecto y de repente perdió tanto la consciencia como el control del vehículo.

Según la versión de algunos testigos, el BMW golpeó por la parte trasera a un turismo rojo conducido por A. A. S., de 39 años. Seguidamente se empotró contra una farola situada al margen derecho de la calzada. El choque desvió la trayectoria del vehículo, que dio un giro de 180 grados, se desplazó hasta el lado contrario y cayó hacia atrás hasta quedar apoyado en otra farola.

Atrapada

El golpe hizo saltar el airbag del asiento del copiloto en el que viajaba la esposa del difunto, D. S. M., que estuvo atrapada durante unos minutos por el amasijo de hierros al que quedó reducida la parte delantera derecha del turismo. Efectivos de bomberos del cuerpo municipal se encargaron de rescatarla mientras los sanitarios trataron sin éxito reanimar a su marido, que no pudo recuperarse de la dolencia y ni siquiera llegó a ser trasladado al complejo hospitalario tras confirmarse el deceso.

Las labores de rescate generaron una gran expectación en la zona. Varios camiones de bomberos, patrullas de la Policía Local y hasta tres ambulancias, una de ellas UVI Móvil, fueron movilizadas y hasta el propio concejal de Seguridad Ciudadana, el popular José Ramón Prado, se desplazó al lugar para interesarse por el rescate. “Había sirenas por todos lados, fue una locura”, explicaba María Remedios López, vecina de la zona, que escuchó desde lejos el impacto y se acercó para ver lo que había pasado. “Es una pena muy grande, no sabemos dónde aguarda una desgracia”, añadió.

La expectación continuó hasta casi hora y media después del accidente. Si bien ya habían sido retirados por la grúa los vehículos implicados, el cuerpo del fallecido tuvo que esperar por la funeraria en las dependencias de una sucursal bancaria hasta las cuatro de la tarde cuando fue recogido por los funerarios con ayuda de los agentes municipales y trasladado al instituto de medicina legal, donde los forenses realizaron las pruebas pertinentes para tratar de confirmar las causas de la muerte.

En lo que respecta a los tres heridos, tan solo la lesiones de la viuda revisten gravedad. La mujer sufrió varias contusiones y fue ingresada en el HUCA para determinar el alcance de los daños y el tratamiento a seguir para su recuperación, pero, al menos a priori, su vida no corre peligro. Del mismo modo, los otros dos heridos, el conductor de 39 años y la acompañante del matrimonio, M. J. F. M, de 66 años, solo sufrieron contusiones leves, aunque esta última también presentaba un cuadro de alteración a consecuencia de la tragedia que acababa de vivir en primera persona.

Los investigadores no descartan que los golpes agravaran el problema de salud de la víctima

Si bien la principal hipótesis apunta a que la muerte de M. K. K., de 70 años, se produjo por causas naturales, los encargados de reconstruir e investigar el aparatoso accidente de ayer a las 14.30 horas en la calle Jovellanos no descartan de momento la posibilidad de que los golpes producidos por el siniestro agravaran la indisposición sufrida por el conductor. Los análisis realizados en el Instituto de Medicina Legal, así como la reconstrucción de los impactos del BMW blanco en el que viajaba la víctima, resultarán claves para resolver las dudas planteadas por el suceso. Miembros del Equipo de Investigación y Reconstrucción de Accidente de Tráfico (EIRAT). Integrantes del equipo de investigación pasaron buena parte de la tarde realizando mediciones y recabando pruebas que puedan arrojar luz sobre contra qué chocó el vehículo en primer lugar, y estaban a la espera de los informes de los forenses para alcanzar las primeras conclusiones.

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