A falta de estación de penitencia, el Nazareno estará hoy todo el día expuesto en su trono, en el interior de la iglesia conventual de Santo Domingo, sede de la cofradía de la que es titular, la más antigua de Oviedo. Este año no habrá capuchones, estandartes, música sacra, hachones ni vía crucis, pero el Señor de Oviedo sí podrá ser venerado por fieles y cofrades. El dinero que se iba a gastar en las flores del trono se destinará a Cáritas Parroquial. A las ocho de la tarde, hora en la que tenía que haber salido la procesión suspendida, oficiará una misa el director espiritual de la cofradía, José Antonio Rodríguez, concelebrada por frailes dominicos.