La Sociedad Filarmónica de Oviedo respira al fin. La emblemática entidad musical, con 115 años de historia, atraviesa una complicada situación económica que ha puesto en entredicho su propia supervivencia. A finales de año, el Ayuntamiento anunció una subvención de 20.000 euros para ayudar a la sociedad. El dinero llegó finalmente este martes, lo que ha sido balsámico para la entidad.

“Estábamos tranquilos porque era una ayuda que estaba aprobada, y porque sabíamos que iba a llegar esta semana, pero ha sido un alivio porque teníamos algunas dudas sobre cómo íbamos a seguir, y esto nos permite afrontar con tranquilidad el próximo trimestre”, explica Santiago González del Valle, presidente de la Sociedad Filarmónica de Oviedo.

González del Valle no oculta que la situación económica de la entidad es delicada, aunque estos 20.000 euros les darán una tregua. “Con esta ayuda, este año ya está salvado, y la Sociedad está fuera de peligro, al menos, en lo que respecta a esta temporada y a abordar la siguiente. Ese bache, que era preocupante, ya está superado”, señala el presidente de la sociedad musical.

Pese al alivio transitorio que supone esta inyección de dinero, la Sociedad Filarmónica no está fuera de peligro. “La situación sigue siendo complicada. La pandemia sigue ahí, nos ha traído restricciones de aforo y ha agravado el descenso del número de socios. No tiene pinta de que esto vaya a mejorar a corto plazo, aunque insisto en que esta ayuda del Ayuntamiento nos da un respiro para afrontar mejor la situación y poder planificar los próximos meses. Podremos medir un poco más las cosas”, señala González del Valle.

Para garantizar el futuro de la entidad, se precisa renovar su nómina de socios. “Con la pandemia han bajado los socios, pero nuestro problema no es solo la pandemia. Entre nuestros socios tenemos una media de edad bastante alta, y muchas de las bajas que registramos son, directamente, por defunción. Nuestros socios son muy fieles y son los que levantan esta sociedad, porque muchos incluso siguen pagando el abono aunque por las restricciones no vienen a los conciertos. La Sociedad Filarmónica sobrevive gracias a ellos y a ayudas puntuales como esta del Ayuntamiento”, dice González del Valle.

Además de la ayuda, la entidad agradece el apoyo unánime del Pleno a la concesión póstuma de la distinción como Hijo predilecto al anterior presidente Jaime Álvarez-Buylla. “Los últimos 50 años de historia de la Sociedad Filarmónica pasan por Jaime, no se pueden explicar con él. Queremos manifestar todo nuestro agradecimiento a los grupos del Pleno por apoyar esta propuesta”, concluye González del Valle.

El violín de Lucía Veintimilla brilla junto a Sergey Bezrodny en el homenaje a Ysaÿe

Bajo el título de “Hommage a Ysaÿe”, la Sociedad Filarmónica completó anoche un doble homenaje al violinista y compositor belga Eugène Ysaÿe, fallecido hace 70 años y que tocó en 1927 para la Filarmónica. Para este sentido tributo, la entidad contó con la violinista Lucía Veintimilla y el pianista Sergey Bezrodny, que diseñaron un itinerario musical atractivo y sugerente conformado por obras de gran relevancia para el músico belga, como por ejemplo, “La sonata para violín y piano en La mayor” que César Franck compuso con motivo del matrimonio de su colega. Durante la velada musical celebrada en el teatro Filarmónica, de casi hora y media, destacaron las interpretaciones de la “Sonata para violín n.°2” de Ysaÿe o la “Guajira” del español Quiroga. El tándem se mostró sólido y Veintimilla lució su virtuosismo y expresión, lo que agradeció un nutrido público.