La riqueza patrimonial del Naranco comienza a abrirse paso entre las grandes masas de matorral. Donde hasta ahora solo se veían malas hierbas están aflorando en las últimas semanas fuentes y lavaderos que para muchos parecían ya no existir en el totémico monte. El motivo es el avance del plan de empleo con el que el Ayuntamiento aspira a tener abiertos y adecentados decenas de kilómetros de nuevas rutas a partir de mayo. De momento, la recuperación del entorno de la conocida como fuente de los Pastores –para algunos, Fuente de Viña– y el lavadero de Entrerregueros –considerado por otros la auténtica fuente de los Pastores– ya es una realidad para deleite de los amantes del pulmón natural de Oviedo.
La labor desarrollada por los 74 integrantes del plan municipal se aprecia ya incluso desde el centro del casco urbano, pues algunos de los desbroces masivos realizados se ven desde varios barrios. Sin embargo, los avances más satisfactorios para los propios trabajadores son los conseguidos en puntos como la Fuente de los Pastores, donde los escalones de acceso a la misma cuentan desde recientes fechas con nuevas barandillas de madera. “En su día las tuvieron, pero el deterioro de los años y el vandalismo la hicieron desaparecer”, indican fuentes del equipo capitaneado por el jefe del plan, Valeriano Gil.
Un poco más arriba de este surtidor se encuentra el lavadero de Entrerregueros, el cual, además de librarse de la maleza gracias al trabajo de los operarios, también cuenta a día de hoy con unas nuevas escaleras encargadas de facilitar la llegada de senderistas y turistas hasta sus inmediaciones. Con este acceso se consigue ampliar varios itinerarios del entorno de la fuente de los Pastores, que en fechas próximas irán más allá con la limpieza de nuevas sendas que conectarán ambos atractivos acuáticos con la fuente de la Tolvona.
Los veteranos conocedores del monte destacan la importancia de estas actuaciones para dar a conocer su riqueza natural escondida durante años. “El Naranco guarda numerosos tesoros acuáticos, pues fue la principal fuente de suministro de agua de la ciudad desde sus inicios”, apunta Juan Calvo, quien junto al también senderista Paco García entregaron recientemente al alcalde, el popular Alfredo Canteli, un inventario con 341, fuentes, lavaderos y otras infraestructuras acuáticas.
Ambos incondicionales de Oviedo en general y el Naranco en particular defienden que la terminología utilizada por el Ayuntamiento para referirse a algunas fuentes del monte es errónea por motivos que desconocen. Concretamente defienden que la conocida por la mayoría como Fuente de los Pastores es en realidad la Fuente de Viña, mientras que el recién acondicionado lavadero de Entrerregueros es en verdad el lavadero de los Pastores y su caño, la auténtica Fuente de los Pastores.
Diferencias toponímicas aparte, la satisfacción por el avance del plan impulsado por Alfredo Canteli para el Naranco es objeto de un aplauso general. Con un presupuesto de 3,3 millones de euros, de los que 2,3 corren a cargo del Principado y el millón restante sale de las arcas municipales, los 74 contratados estarán hasta el mes de agosto trabajando a destajo para dejar en buen estado para pasear alrededor de un centenar de kilómetros de rutas que conectarán varios barrios de la ciudad con la cima del totémico monte.
Además de las sendas, los neveros, los vestigios de las Guerra Civil, las áreas recreativas y el mobiliario será objeto de un intenso lavado de cara que tendrá continuidad mediante un plan específico de mantenimiento en años sucesivos. La finalidad: convertir el Naranco en uno de los grandes atractivos turísticos de la ciudad y zona de disfrute para todos los ovetenses. Música para los oídos de todo amante de la naturaleza.
