Más de tres décadas después de que Carl Lewis pusiera los focos del atletismo mundial en Oviedo con su participación en una prueba en el Palacio de los Deportes, en febrero de 1989 –sorprendentemente, el “hijo del viento” perdió ante el cubano Ricardo Chacón–, la capital asturiana quiere reverdecer laureles y hacer de la futura pista cubierta de la falda del Naranco el templo del atletismo bajo techo en el norte de España. El Consistorio planea una instalación con capacidad para 2.500 espectadores y ve en la construcción de la nueva pista una gran oportunidad para albergar pruebas de carácter nacional e internacional en la ciudad.
El objetivo de la concejala de Deportes, Conchita Méndez (PP), es finalizar el actual mandato con una renovación y reorganización de los recintos deportivos a partir de un “efecto dominó” iniciado hace escasos días. La adjudicación del derribo del fallido spa del Naranco dejará en cuatro meses un solar limpio de 41.000 metros cuadrados sobre el que está previsto empezar a construir a finales del presente año el nuevo recinto cubierto. Allí se trasladará la pista de atletismo instalada actualmente en el Palacio de Deportes, en Ventanielles, que así podrá, en un futuro próximo, afrontar su remodelación, doblar su capacidad y albergar, a su vez, competiciones deportivas de primer nivel y servir de cancha para equipos como el Oviedo Baloncesto, obligado en su Liga, le LEB Oro, a contar con más capacidad que su actual pista de Pumarín.
Tanto el proyecto de la pista cubierta como el de la reforma del Palacio se redactan en paralelo, aunque no hay un diseño definitivo. “Queremos que la pista de atletismo tenga gradas con capacidad para 2.500 personas para que nos permita seguir siendo un referente de este deporte”.
Desde el Ayuntamiento reconocen que, en ocasiones, las previsiones se ven afectadas por imprevistos administrativos, pero sus planes son claros. “Nuestra intención es empezar las obras a finales de este año y poder inaugurar la nueva pista en octubre de 2022”, indica Méndez sobre un proyecto que se financiaría con carácter plurianual y que este año dispone de un presupuesto de 400.000 euros para iniciarse.
La reorganización será, sin embargo, mucho más compleja que eso. La concejalía está ultimando la sustitución del suelo de los polideportivos de Colloto, La Carisa y Vallobín. La actuación, además de permitir renovar instalaciones deterioradas por la carga de actividad y el paso del tiempo, se hace en previsión de la necesidad de trasladar actividades a estos recintos cuando den comienzo los trabajos para ampliar el Palacio de los Deportes, unas obras que podrían iniciarse a comienzos del próximo año, con la intención de tenerlos listos a lo largo de 2023.
Gran pabellón
Una vez culminados todos estos planes, la falda del Naranco se convertiría en el gran centro de alto rendimiento para atletas locales, y el Palacio sería el gran pabellón de la ciudad, con un aforo de entre 3.000 y 5000 espectadores, para disfrute de los grandes equipos de categoría nacional como son el Oviedo Baloncesto o el equipo de balonmano, entre otras entidades punteras de la capital asturiana.
