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Intervención da la razón al Otero Brutal Fest y le devuelve parte de la subvención que Cultura le negaba

La asociación musical confía en saldar las deudas de la edición de 2019 tras año y medio peleando para recuperar sus gastos

Una imagen de la edición del Otero Brutal Fest de 2018. Luisma Murias

La asociación musical Otero Crew, organizadores del festival Otero Brutal Fest, cita especializada en la música hardcore y metal de Oviedo, respiró ayer aliviada. Los servicios de Intervención del Ayuntamiento de Oviedo acaban de mandar a la Fundación Musical de Cultura que les pague parte del dinero correspondiente a la subvención de 2019 que hasta ahora les era negado sistemáticamente.

Intervención reconoce algunos gastos que Cultura les había negado, como unas facturas a la Sociedad General de Autores y Editores en pago de derechos. También reconoce que la asociación tiene derecho a sumar como gastos los financiados con otros ingresos, cuestión que la Fundación Municipal de Cultura también negaba. Descontados los ingresos obtenidos y descartados los gastos no subvencionables, los servicios municipales calculan que Cultura todavía tiene que abonar 8.641,83 euros para llegar a la cifra total de 33.640,52 euros susceptibles de recibir ayuda, frente a los 24.998,69 euros que habían cobrado.

Esos 8.600 euros, explica Alejandro García, uno de los coorganizadores del festival, será suficiente para que la “crew” de Otero deje de ingresar 700 euros mensuales para devolver el último préstamo a los bancos, puedan cerrar los flecos de la última edición, la de 2019, y ponerse a pensar en otra cosa para los tiempos en que los conciertos vuelvan a las salas.

La Otero Crew comenzó hace ocho años organizando pequeños conciertos. Después surgió la idea de programar un festival que cada año fue creciendo, incorporando bandas internacionales y aumentando el aforo y las expectativas.

Tras los primeros festivales en salas de conciertos, la cuarta edición fue al aire libre. Para la quinta se instalaron en el Parque del Oeste y en la sexta lograron el mayor compromiso presupuestario del Ayuntamiento de Oviedo, 42.000 euros, tras una ayuda de 3.000 en la edición anterior. El tripartido dejó prometida una subvención de 80.000 euros y con la entrada del nuevo gobierno se la dejaron en 50.000. Con esa previsión, el Otero Brutal Fest se celebró a finales de 2019 en la sala Stilo y desde entonces Cultura les ha ido denegando distintas justificaciones de facturas, hasta que Intervención intervino en el pleito.

Explican los organizadores que, sumadas las ayudas de tres años, toda la ayuda pública recibida ha sido de 78.000 euros, frente a una inversión total de 350.000 euros durante estos siete años. Calculan que cada uno de los seis miembros de la asociación, por amor al arte, al hardcore y al metal, llevan puestos 4.000 euros de su bolsillo para poder traer grupos a tocar la ciudad que en circunstancias normales nadie traería. Aunque les cueste tiempo, dinero y estas peleas con la administración.

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